miércoles, 26 de agosto de 2020

Los sindicatos, cautos con el plan de vuelta a clase por la “baja credibilidad” de Ayuso (María F. Sánchez para CUARTOPODER.ES)

Reproducimos este artículo de CUARTOPODER.ES




La pandemia ha provocado un gran dilema en la educación que afecta a alumnos, docentes y familias. Semana y media antes de que inicie el curso, Isabel Díaz Ayuso ha anunciado el plan de su Gobierno de regreso escalonado en fechas para la vuelta al colegio, que conlleva una inversión de 370 millones y la contratación de 11.000 trabajadores. La noticia ha llegado bajo una convocatoria de huelga educativa que se realizó la semana pasada para exigir una vuelta al colegio planificada y segura. Los sindicatos, todavía lejos de desconvocar la huelga, muestran cautela con el anuncio y se centrarán en analizar y vigilar las medidas anunciadas para asegurarse de que el plan no es un brindis al sol.

De momento, no se habla de desconvocar la huelga planteada por CCOO, UGT, CGT y STEM para los primeros días del curso escolar. Que por fin haya llegado el esperado anuncio de las medidas no es suficiente motivo para cancelar la convocatoria. Consideran que el Gobierno madrileño “llega muy tarde” y que durante los últimos meses han dado motivos para desconfiar. “Su credibilidad es muy baja”, apunta a cuartopoder la secretaria general de Enseñanza de CCOO Madrid, Isabel Galvín. “Tenemos mucha prudencia y mucha cautela, cada vez que anuncian algo se queda en humo, en artificio o blanquean las cifras”, añade Enrique Díaz Tenorio, delegado de CGT y parte del comité de huelga.


A pesar de las críticas de Díaz Ayuso a la convocatoria de una huelga educativa durante este inicio de curso pandémico, los sindicatos consideran que ahora se demuestra la utilidad del instrumento. “Si no hubiera habido anuncio de huelga, no hubiera habido plan”, manifiesta Galvín.

De hecho, convocantes de la huelga como CGT ponen la atención en evitar la desmovilización del profesorado y las familias porque temen que este sea realmente el principal objetivo del Gobierno regional. “Tenemos la sensación de que estamos ante una cortina de humo para desmovilizar”, apunta Díaz Tenorio.
370 millones y 11.000 nuevos profesionales. ¿Será suficiente?

Díaz Ayuso ha anunciado a bombo y platillo este martes una inversión de 370 millones para la vuelta al colegio y la incorporación de 10.600 nuevos profesionales, entre educadores, técnicos especialistas, maestros y profesores. Todo el esfuerzo va destinado a unas medidas de mayor seguridad en los centros educativos y aulas con menos alumnos. Más allá, la presidenta ha anunciado que las bajas ratios se mantendrán después de la pandemia, una intención que ha sorprendido a los sindicatos porque hasta la fecha no constaba en las comunicaciones del Gobierno.

CCOO había pedido la contratación de 11.000 profesores para la pública, la cifra que estimaban necesaria según sus cálculos. Sin embargo, según la Comunidad de Madrid, 2.662 de estos docentes irán destinados a los centros concertados. “Nos sentimos aludidos ya que han hablado de esta cifra redondeada de 11.000, pero de esos 10.600 anunciados tendremos que ver si son todos profesores y si son para la pública”, explica Galvín. A su sindicato le parece que la cifra de 370 millones se queda corta para todas las medidas que ha anunciado la Comunidad. “Creemos que todo lo anunciado cuesta 100 millones más”, añade.


“Queremos fechas y tipos de contrato”, indica Díaz Tenorio respecto a la contratación de maestros. El sindicalista recuerda que el consejero de Educación y Juventud de la Comunidad de Madrid, Enrique Ossorio, anunció en junio la contratación de voluntarios de ONG, estudiantes de magisterio y monitores para atender al alumnado, una medida que los sindicatos rechazaron. También cree necesario asegurar que entre esos “nuevos” contratados no se camuflen los contratos de los profesores interinos que se realizan cada año y son ajenos a la pandemia.
Sobre la presencialidad y la semipresencialidad

Según el plan elaborado para la vuelta al colegio en Madrid, a partir de 3º de la ESO los estudiantes acudirán a los centros educativos en un modelo semipresencial, con un tercio de la parte del horario semanal de forma presencial. Para facilitar este trabajo online, tanto para estos alumnos como para aquellos que tengan que permanecer un tiempo en cuarentena, la Comunidad de Madrid instalará 6.100 cámaras en las aulas para impartir clases 'online' y comprará 70.000 ordenadores para profesores y estudiantes.

Los convocantes de la huelga, así como organizaciones como Save The Children, ya han advertido que continuar con la modalidad 'online' de estudio puede volver a perjudicar a los menores más desfavorecidos, ya que entre un 20% y un 30% de los alumnos estuvieron totalmente desconectados durante el anterior confinamiento, según las propias autoridades. “Nosotros queremos una vuelta segura y de presencialidad plena y queremos que en ello se empleen los recursos. Lo de las cámaras nos parece una ocurrencia”, indica Díaz Tenorio.

Por su parte, Galvín aprecia que unos pocos miles de cámaras no sirven para solventar un problema porque son un número muy bajo para surtir a todos los centros eductativos de Madrid. También observa otras medidas insuficientes, como la contratación de 150 personales de enfermería que se ha anunciado este martes, cuando “se necesita una figura sanitaria por centro”. Surgen también otras dudas sobre la habilitación de espacios para poder tener a menos alumnos por clase, una gestión que necesita de la comunicación con los ayuntamientos a pocos días de que empiece el curso.

Estas son las primeras apreciaciones porque los sindicatos están a la espera de poder estudiar con detalle el documento elaborado por la Comunidad de Madrid y a ver cómo se concretan las medidas, como la contratación de profesorado que debe realizarse con inmediatez para que se pueda contar con él en el inicio del curso. “La credibilidad está muy tocada, se necesitan hechos. No nos vale una rueda de prensa con anuncios que suenan bien”, concluye Galvín.

No hay comentarios:

Publicar un comentario