A escasos días de la apertura de los colegios, la mayoría de padres de alumnos todavía no ha podido solicitar ni las becas para libros ni tampoco las ayudas al comedor ante el silencio administrativo de la mayoría de las comunidades autónomas. Para Jesús María Sánchez, presidente de la Confederación Española de Asociaciones de Padres y Madres de Alumnos (Ceapa), "esto dará origen al comienzo de curso más problemático que recuerdo. El inicio de las clases se va a caracterizar este año por que un tercio de los estudiantes entre 6 y 16 años no podrá empezar las clases con el material necesario".
El gran desahogo que suponen estas subvenciones, especialmente para las familias con menos recursos, solía estar preparado ya en el mes de mayo. "Sin embargo, adentrados en el mes de septiembre, y salvo Valencia que ha abierto las solicitudes para libros, el resto mantiene un silencio absoluto que parece vaticinar lo peor, y prueba de ello, es la idea de Aguirre de permitir llevar el tupper a cambio de cinco euros", añade Sánchez.
El retraso parece haber chocado este año con la mala situación financiera por la que atraviesa la mayoría de las comunidades autónomas, que no solo les ha impedido resolver los asuntos de educación, sino que les ha incapacitado a pagar las facturas corrientes. E incluso lo más importante para su credibilidad: su deuda. La petición de rescate por parte de Cataluña, Murcia y Valencia, sin embargo, podría devolver las aguas a su cauce, pero a la espera de que llegue este maná, muchos padres realizan cábalas para ajustar sus presupuestos domésticos al inicio del curso escolar.
Reducción de importes
La Generalitat Valenciana es una de las pocas que ha abierto la solicitud de becas para libros, aunque reduciendo los importes. "La máxima cantidad que puede recibir un alumno asciende a 125 euros, lo que supone una disminución media del 75% de las cantidades del año pasado", valora el presidente de Ceapa.
Madrid podría ser la siguiente. La consejera de Educación, Lucía Figar, ha anunciado a CincoDías que "las becas para libros y las ayudas al comedor se pondrán en marcha en los próximos días", lo que aleja la idea de eliminarlas, como se llegó a especular a tenor de las palabras de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre.
La Junta de Andalucía, por su parte, no realiza convocatorias porque su sistema es totalmente distinto. Ofrece libros gratuitos a todo el alumnado en la enseñanza obligatoria, gracias a un sistema de alquiler, renovado cada cuatro años. En el comedor, los niños andaluces cuentan con un precio único público de 4,5 euros, pero el 70% de los estudiantes tiene subvenciones.
En el resto de las comunidades, las ayudas autonómicas al comedor se encuentran entre el 50% y el 75% del coste del menú, que oscila entre 2,5 y 6 euros, según el Gobierno regional. Aguirre pretende ahora que las familias paguen cinco euros por traer el tupper a cambio de utilizar las instalaciones, un anuncio que ya ha generado multitud de críticas.
La falta de recursos pone en liza los cimientos de la reforma educativa diseñada por el ministro de Educación y Cultura, José Ignacio Wert. Su modelo, presentado a todos los integrantes de la comunidad educativa antes del periodo estival, necesita múltiples recursos para contentar a todos. El Bachillerato de tres años significa un cambio de gran calado, pero no es lo único. La enseñanza bilingüe, la implantación de las nuevas tecnologías y un nuevo acceso a la profesión del profesorado son medidas caras en un contexto de recortes.
La llamada marea verde, que recorrió las calles de España durante todo el año en defensa de un sistema público, intenta evitar que la reforma deje al sistema con menos profesores. En España, según estimaciones de CC OO, unos 5.000 docentes perdieron su trabajo en los dos cursos anteriores, a los que se sumarán otros 2.000 más este curso, entre educación primaria y secundaria.
Para Héctor Adsuar, responsable del área de interinos de CC OO en Madrid, "los recortes están degradando la calidad educativa y, por esa razón, no afectan solo a los profesores, sino a toda la sociedad". Califica la reforma educativa de Wert como "una cortina de humo, sin pies ni cabeza, que pretende distraer a la opinión pública" y opina que "el Gobierno usa la crisis como excusa para imponer su modelo". Adsuar recuerda que, aparte de haber menos interinos contratados, se está produciendo una merma de la plantilla docente por culpa de la menor tasa de reposición. "Solo se suple a uno de cada diez profesores jubilados", afirma. Para este curso, augura "movilizaciones de en el sector que se coordinarán con las movilizaciones generales".
Con el fin de discutir la estrategia y el calendario de movilizaciones para este curso, el pasado viernes se celebró en la sede madrileña del sindicato CC OO la primera asamblea de la marea verde en la capital desde junio. El debate se centró en la posibilidad de que los docentes hagan una huelga indefinida, pero solo el representante de la CGT apoyó esa opción. Lo que sí se acordó es que los profesores porten el primer día de clase la consabida camiseta verde, que se ha erigido en símbolo de la lucha por la educación pública. Por lo demás, atendiendo a lo dicho durante la reunión, se prevé "un otoño caliente", plagado de protestas y manifestaciones.
En cuestiones académicas y, según las opiniones vertidas en la consulta pública, la mayoría coincide en la necesidad de fomentar las tecnologías, reforzar los idiomas extranjeros, incrementar las horas de matemáticas y ciencias, e incluso introducir economía, con objeto de adaptarse a la demanda del tejido empresarial. La gran brecha digital entre alumnos y profesores se demuestra en que actualmente el 87,3% de los alumnos de 10 a 15 años acceden desde casa a internet, mientras que solo un 53% lo utiliza en la escuela.
En cualquier caso, la gran asignatura pendiente sigue siendo atraer a los jóvenes a la Formación Profesional para "fomentar la empleabilidad". Con la mitad de la juventud española en paro, urge una solución rápida para evitar que el éxodo convierta a España en un país sin futuro, sin la generación mejor preparada de su historia.
Las voces de los profesionales españoles ante la futura reforma
Carmen Guaita . "La reforma es necesaria pero falta motivación"
Las posturas de los profesores al respecto de la reforma educativa son muy heterogéneas. Sindicatos como CC OO y Stem ven en ella un subterfugio para desviar la atención de los recortes, pero otros, como Anpe, se muestran algo más moderados. "La reforma es necesaria desde hace tiempo pero faltan motivación y financiación", afirma su vicepresidenta, Carmen Guaita. "Sin el compromiso de los profesores, no se puede hacer nada", reconoce Guaita, que demanda un estatuto y "mayor consideración social" para el gremio de los docentes.
La idea de las reválidas le agrada, pero "entendidas como un medio para detectar problemas y mejorar, no como fin en sí mismas". Para ella, el acceso a la profesión "no funciona bien", por lo que hay que buscar "un sistema equilibrado" para elegir y formar al profesorado. El objetivo final de los cambios le parece claro: "Combatir el fracaso escolar".
Jesús María Sánchez. "Las dos reválidas serán un sistema de criba"
Los padres, reunidos en Ceapa, consideran que "las dos reválidas, una para sexto de Primaria, y otra para cuarto de ESO, serán un sistema de criba del alumnado", según su presidente, Jesús María Sánchez. Desde su punto de vista, la reforma debe incidir más en la educación infantil y primaria. "Hay una gran carencia de oferta de plazas para las edades de cero a tres años y de tres a seis años, que es donde se sientan las bases de la educación".
Además, considera esencial la formación del profesorado, porque "ahora son maestros del siglo XIX, con metodología del siglo XX y alumnos del XXI". Por su parte, los padres de la enseñanza concertada unidos en Concapa, creen que "es positivo implantar la cultura de la evolución para paliar el gran fracaso escolar y también vemos positivo un Bachillerato de tres años", dice Luis Carbonell.
Lucía Figar. "Secundaria necesita vías más flexibles"
La consejera de Educación madrileña, Lucía Figar, asegura que uno de los grandes problemas educativos en España es la rigidez que existe en la Enseñanza Secundaria Obligatoria (ESO). "Esto hace que no haya posibilidades de adaptarse a los distintos talentos o capacidades económicas de los alumnos", por lo que se muestra de acuerdo con lo previsto en la reforma del titular de Educación. No es lo único.
Figar considera que faltan incentivos al esfuerzo y que se necesita un nuevo sistema con el que seleccionar a los mejores profesores. También aboga por el sistema de exámenes propuestos por el Gobierno en sexto de Primaria, cuarto de ESO y final de Bachillerato. "Madrid, como Cataluña, Valencia y Castilla y León, lleva realizando pruebas sin validez académica y han servido para mejorar la calidad de la enseñanza en todos los colegios".
José Antonio Martínez. "Es difícil hacer cambios cuando faltan recursos"
Los directores de centros educativos públicos son cautos acerca del resultado de la reforma educativa. "Sería deseable un consenso que no parece probable, y estabilidad como para que los cambios surtan efecto", indica José Antonio Martínez, presidente de la Federación de Asociaciones de Directivos de Centros Educativos Públicos.
"Se habla demasiado de excelencia, cuando lo que se debe hacer es responder a las necesidades del alumnado", señala Martínez, que incide en que "es difícil hacer reformas cuando faltan recursos". Señala que "no es igual recortar en un sistema consolidado que en uno en formación, como es el nuestro". Para él, el problema del sistema educativo español es su relativa juventud. "Hemos llegado muy tarde", se lamenta. Para el curso actual ve "un panorama complicado", agravado por "los recortes brutales en la enseñanza".
Las cifras
231.403 profesores había en España en 2011.
Las voces de los profesionales españoles ante la futura reforma
Carmen Guaita . "La reforma es necesaria pero falta motivación"
Las posturas de los profesores al respecto de la reforma educativa son muy heterogéneas. Sindicatos como CC OO y Stem ven en ella un subterfugio para desviar la atención de los recortes, pero otros, como Anpe, se muestran algo más moderados. "La reforma es necesaria desde hace tiempo pero faltan motivación y financiación", afirma su vicepresidenta, Carmen Guaita. "Sin el compromiso de los profesores, no se puede hacer nada", reconoce Guaita, que demanda un estatuto y "mayor consideración social" para el gremio de los docentes.
La idea de las reválidas le agrada, pero "entendidas como un medio para detectar problemas y mejorar, no como fin en sí mismas". Para ella, el acceso a la profesión "no funciona bien", por lo que hay que buscar "un sistema equilibrado" para elegir y formar al profesorado. El objetivo final de los cambios le parece claro: "Combatir el fracaso escolar".
Jesús María Sánchez. "Las dos reválidas serán un sistema de criba"
Los padres, reunidos en Ceapa, consideran que "las dos reválidas, una para sexto de Primaria, y otra para cuarto de ESO, serán un sistema de criba del alumnado", según su presidente, Jesús María Sánchez. Desde su punto de vista, la reforma debe incidir más en la educación infantil y primaria. "Hay una gran carencia de oferta de plazas para las edades de cero a tres años y de tres a seis años, que es donde se sientan las bases de la educación".
Además, considera esencial la formación del profesorado, porque "ahora son maestros del siglo XIX, con metodología del siglo XX y alumnos del XXI". Por su parte, los padres de la enseñanza concertada unidos en Concapa, creen que "es positivo implantar la cultura de la evolución para paliar el gran fracaso escolar y también vemos positivo un Bachillerato de tres años", dice Luis Carbonell.
Lucía Figar. "Secundaria necesita vías más flexibles"
La consejera de Educación madrileña, Lucía Figar, asegura que uno de los grandes problemas educativos en España es la rigidez que existe en la Enseñanza Secundaria Obligatoria (ESO). "Esto hace que no haya posibilidades de adaptarse a los distintos talentos o capacidades económicas de los alumnos", por lo que se muestra de acuerdo con lo previsto en la reforma del titular de Educación. No es lo único.
Figar considera que faltan incentivos al esfuerzo y que se necesita un nuevo sistema con el que seleccionar a los mejores profesores. También aboga por el sistema de exámenes propuestos por el Gobierno en sexto de Primaria, cuarto de ESO y final de Bachillerato. "Madrid, como Cataluña, Valencia y Castilla y León, lleva realizando pruebas sin validez académica y han servido para mejorar la calidad de la enseñanza en todos los colegios".
José Antonio Martínez. "Es difícil hacer cambios cuando faltan recursos"
Los directores de centros educativos públicos son cautos acerca del resultado de la reforma educativa. "Sería deseable un consenso que no parece probable, y estabilidad como para que los cambios surtan efecto", indica José Antonio Martínez, presidente de la Federación de Asociaciones de Directivos de Centros Educativos Públicos.
"Se habla demasiado de excelencia, cuando lo que se debe hacer es responder a las necesidades del alumnado", señala Martínez, que incide en que "es difícil hacer reformas cuando faltan recursos". Señala que "no es igual recortar en un sistema consolidado que en uno en formación, como es el nuestro". Para él, el problema del sistema educativo español es su relativa juventud. "Hemos llegado muy tarde", se lamenta. Para el curso actual ve "un panorama complicado", agravado por "los recortes brutales en la enseñanza".
Las cifras
231.403 profesores había en España en 2011.
75% es el recorte que ha experimentado la beca de libros en Valencia.
2,5 euros es el coste mínimo de un menú de colegio, que puede elevarse hasta 6 euros, según cada región.
Publicado en cincodias.com
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