1. La movilización ciudadana está volcada con la protección de la Educación Pública como la conocemos ahora. Pero realmente ¿se está consiguiendo una respuesta por parte de los gobiernos regionales y el estatal? En caso que si, ¿qué elementos específicos se pueden destacar de esta respuesta?
La respuesta de las autoridades españolas es mínima por no decir nula. Los partidos políticos están sordos ante tanto clamor popular y han optado por seguir la ruta marcada. Quieren privatizar la educación, ese es el objetivo. Será difícil que suelten su presa aunque todos los ciudadanos unidos podemos lograrlo. Además, en el caso de algunas CCAA la reacción ha sido la contraria a la esperada, han aumentado el ataque y han optado en algunos casos por el desprestigio del colectivo buscando que la ciudadanía nos abandone. Se nos ha hecho creer que el estado es algo ajeno a la ciudadanía, que pertenece a los políticos, esta distancia ha generado una cultura de la delegación contra la cual también luchamos. Los políticos rápidamente lo han asumido y han convertido todo bien común en su propiedad, lo han puesto en venta, buscando, en muchos casos, su propio beneficio. Desde luego no queremos ser representados por quienes nos roban y nos venden al mejor postor ni esperamos gran cosa de ellos. Nuestra concepción de la democracia es profunda y va mucho más allá…
2. Hoy por hoy ¿creen que se puede paralizar el proceso legislativo?
La LOMCE solo la podemos parar los ciudadanos y creemos que podemos conseguirlo. Es una ley retrógrada que supone un descarado ataque a la escuela pública. La ciudadanía no va a permitir que le roben lo que tanto ha costado conseguir.
3. Desde su plataforma ¿qué se está haciendo para intentan paralizar el proceso o al menos que se cambien algunos de los puntos de la Ley Wert?
Informar, informar e informar. Esa es nuestra estrategia porque, ante tal maquinaria de propaganda, solo podemos presentarnos ante los españoles con el arma más poderosa con la que cuentan los docentes, el conocimiento, los datos, la información contrastada. Somos concienzudos y rigurosos en la elaboración de nuestros informes para que puedan servir como revulsivo.
4. ¿Cuentan con algún apoyo por parte del sector político?
Nuestro colectivo al igual que la sociedad está formado por personas que piensan y que participan de la vida política de manera muy diferente, pero si algo nos une es la defensa de lo público. Por eso, desde el principio tuvimos claro que no queríamos mezclarnos con ningún partido, ni sindicato. Esta independencia nos hace señalar con el dedo todas aquellas acciones de unos u otros que perjudican seriamente el futuro de la educación 100% pública y “gratuita” (pagada con los impuestos de todos/as). No recibimos apoyo económico de nadie, aunque sí un gran apoyo moral de numerosos colectivos, pues formamos parte de un amplio grupo de movimientos sociales surgidos antes y después del estallido del 15M.
5. ¿Qué más se puede hacer para que el Gobierno escuche sus propuestas y tome las medidas necesarias?
Seguir y no rendirse. No cejar en nuestro empeño porque sabemos que es una causa justa por la que merece la pena luchar. Tal vez deberíamos empezar a ser más contundentes y realizar acciones similares a las puestas en marcha por colectivos como la PAH. La acción directa y la huelga indefinida son herramientas que siempre hemos defendido porque, a día de hoy, siguen siendo las más efectivas.
6. En caso de que la ley entre en vigor, ¿Qué iniciativas llevarían a cabo?
La ley no puede entrar en vigor porque si no, será mucho más difícil cambiar nada. Hay que tratar de pararla antes y en eso estamos. No contemplamos la posibilidad de que se apruebe porque ese es el peor de los escenarios posibles. Si ocurriera tendríamos que esperar a un cambio de gobierno y que este nuevo ejecutivo se comprometiera a eliminarla, cosa que dudamos… Preferimos pensar que vamos a parar este sinsentido.
7. ¿Cuáles son sus próximas acciones o movilizaciones públicas?
Como ya hemos comentado, nuestra posición actual como colectivo es informar de manera incesante, una estrategia nada desdeñable teniendo en cuenta la inmensa campaña de desprestigio contra la escuela pública que se lleva a cabo desde todos los grandes medios de comunicación tradicionales. También queremos destacar la presencia de un colectivo amigo, como es Aulas en la Calle, que hacen una especial y muy original campaña en favor de la escuela pública sacando literalmente las aulas a la calle y mostrando a la gente cómo se trabaja con los niños y las niñas dentro de una escuela pública. Como podéis comprobar, dentro de lo que se ha venido llamando la Marea Verde, cada colectivo tenemos un cometido distinto, si bien el objetivo es el mismo: sacar al capital financiero de nuestras aulas y promover una educación crítica y del conocimiento, alejada de los devenires del mercado (como se puede comprobar a nivel mundial, MUY POCO ESTABLES).
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