Manifiesto de "Segovia en Vela" contra los recortes en la Universidad

Luis nos envía un manifiesto leído el viernes en Segovia. Nos explica que a mediodía del viernes, siguiendo con las actividades que está promoviendo Segovia en Vela, colectivo en defensa de la educación pública (clases en la calle, cadenas humanas, asambleas, una fiesta por la escuela pública el domingo, un encierro el lunes, la huelga del martes-) se ha guardado un minuto de silencio ante la entrada de la Escuela de Magisterio de Segovia.

Una alumna de 1º de Magisterio de Educación Infantil ha leído este texto para explicar por qué:

¿POR QUÉ ESTAMOS AQUÍ?

¿Por qué estamos tanta gente, profesorado y alumnado, al borde de un fin de semana, entristecidos por este ataque brutal a la universidad pública, frente a la entrada de esta Escuela?

En realidad habría que preguntar a quien nos gobierna cómo nos han llevado a este grado de indefensión, a este hartazgo.


Como ellos no van a responder -hace tiempo que cuentan los votos, pero no  cuentan con las personas- tendremos que dar nosotros las respuestas.

Estamos aquí guardando un minuto de silencio por la universidad pública. Un minuto de silencio es una expresión de condolencia, un gesto de respeto en homenaje a una institución valiosa con la que pretenden acabar.

La universidad nació siendo una ocupación para burgueses y ricos, de la que se excluía a la parte más desfavorecida de la sociedad. Con el progreso de la sociedad y fruto de las luchas sociales, la universidad se convirtió en una institución con un carácter mucho más abierto a casi todo el conjunto de la ciudadanía, que encontró en ella una continuidad de la igualdad de oportunidades que intentaba alimentar la escuela pública.

Ahora, ellos se han dado cuenta de que la educación superior como servicio público es incompatible con los intereses de los mercaderes. Y han decidido acabar con ella, asesinarla. Subirán las matrículas (nada menos que un 66%, según se desprende de las palabras del Consejero de Educación), recortarán las becas (un 11,6% tal y como figura en el proyecto de Presupuestos Generales del Estado), reducirán el profesorado y a los que queden les sobrecargarán su horario.

Por eso estamos aquí, porque como se ha repetido estos días, muchos alumnos y alumnas tendrán que abandonar sus estudios, porque con que sólo una persona se quedase fuera por esta razón, esta política ya sería radicalmente injusta.

Estamos aquí también porque mintieron. Prometieron no tocar la educación y la han guillotinado, porque se burlan de nosotros cuando dicen que las medidas que toman no afectan a la calidad de la enseñanza y mejoran su eficacia.

¿Por qué estamos aquí, por qué guardamos este minuto de silencio? Son los gobiernos central y autonómicos los que deberían preguntarse qué han hecho para que nos movilicemos. Lo que han hecho es sabido: favorecer la privatización de la educación, suprimir profesorado, reducir las becas, decretar el mayor recorte de la educación que ha conocido la historia de este país, robar el futuro laboral y académico a la generación juvenil mejor preparada, mentir para justificar estas medidas, incumplir promesas
electorales.


Eso es lo que han hecho. Lo que no han hecho es escuchar a la calle, a la comunidad universitaria ni explicar ni uno solo de sus pasos de forma  convincente. Por eso estamos aquí.

Estamos aquí porque si no estamos, no quiero ni imaginar dónde estaremos en mayo de 2013. Y estamos aquí porque si no es aquí, no vamos a poder estar en ninguna parte.

No nos resignamos. No hay nada más triste que oír decir: no tiene remedio, qué le vamos a hacer. Eso es lo que quiere el poder, pero el destino lo tenemos que inventar todos juntos. Vamos a defender la educación pública con todas nuestras fuerzas, es el futuro de nuestro pueblo.