El ministro de Educación asegura en el Senado que "es bastante razonable" que los alumnos que no optan por la religión en la escuela puedan "aprovechar el tiempo" como sí hacen quienes eligen la enseñanza católica en las aulas. El PSOE le acusa de ser un "toro bravo" con alumnos, profesores y padres y un "toro manso" con la Conferencia Episcopal
El debate sobre la recuperación una asignatura alternativa a la religión
-una de las medidas más controvertidas de la reforma educativa- se ha
colado esta tarde en el pleno del Senado. El senador socialista, Emilio Alvarez
Villazán, preguntaba al ministro sobre "si existe alguna razón distinta de
atender la reivindicación de la Conferencia Episcopal Española para que el
borrador de la LOMCE recupere la asignatura alternativa a la Religión".
En su respuesta, el ministro Wert ha argumentado que la medida está amparada por los acuerdos con el Vaticano y se ha escudado también en los resultados académicos de los escolares españoles. Según Wert, "con los resultados que tenemos, y habida cuenta de que la religión es una materia de oferta obligatoria y voluntaria para el alumno, parece bastante razonable que exista una asignatura espejo para que quienes deciden no cursar la asignatura puedan aprovechar su tiempo al igual que sí lo aprovechan quienes estudian Religión. Es tan simple como eso, tan poco problemático como esto y tan susceptible de consenso como todo esto", remachaba el ministro.
La respuesta no convencía al senador socialista Emilio Alvarez Villazán que ha acusado al ministro de "ir para atrás y romper los consensos en materia de religión y educación". "Si ustedes no rectifican, entonces nosotros pediremos que la Religión salga directamente del currículo educativo y el horario escolar como por ejemplo pasa en Francia", señalaba Alvarez Villazán que acababa pidiendo al ministro que "deje de ser un toro bravo con padres, alumnos y profesores y un toro manso con los obispos".
Puedes escuchar el debate aquí:
En su respuesta, el ministro Wert ha argumentado que la medida está amparada por los acuerdos con el Vaticano y se ha escudado también en los resultados académicos de los escolares españoles. Según Wert, "con los resultados que tenemos, y habida cuenta de que la religión es una materia de oferta obligatoria y voluntaria para el alumno, parece bastante razonable que exista una asignatura espejo para que quienes deciden no cursar la asignatura puedan aprovechar su tiempo al igual que sí lo aprovechan quienes estudian Religión. Es tan simple como eso, tan poco problemático como esto y tan susceptible de consenso como todo esto", remachaba el ministro.
La respuesta no convencía al senador socialista Emilio Alvarez Villazán que ha acusado al ministro de "ir para atrás y romper los consensos en materia de religión y educación". "Si ustedes no rectifican, entonces nosotros pediremos que la Religión salga directamente del currículo educativo y el horario escolar como por ejemplo pasa en Francia", señalaba Alvarez Villazán que acababa pidiendo al ministro que "deje de ser un toro bravo con padres, alumnos y profesores y un toro manso con los obispos".
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