El rechazo tajante de diálogo en torno a la Ley Orgánica de Mejora de la Calidad Educativa (LOMCE) expresado este lunes por el ministro José Ignacio Wert a la consejera Cristina Uriarte convierte al Grupo Vasco del Congreso de los Diputados en la primera línea de defensa de las competencias y el modelo vasco en materia de Educación. En el grupo parlamentario recae ahora la responsabilidad de enmendar el texto para evitar una "ideologización y españolización" de la enseñanza en Euskadi, además de la "postración y marginalidad del euskera". En el Gobierno vasco no descartan que las modificaciones que pueda hacer el ministro sean para "empeorar" el texto.
En el Grupo Vasco están a la espera de que se registre la entrada del proyecto de Ley para conocer el plazo de presentación de sus enmiendas que, con toda seguridad, tendrán como eje central la defensa del euskera y del ámbito competencial vasco. Fuentes parlamentarias señalaron a DEIA que aún no conocen el texto definitivo del proyecto de Ley a pesar de que Wert afirmó el lunes que el anteproyecto "está cerrado" y es inamovible. Hasta ahora el Grupo Vasco ha podido trabajar sobre el borrador de la LOMCE presentado por el Gobierno español en diciembre, pero calcula que en breve el Consejo de Ministros aprobará el proyecto que aún deberá someterse a la revisión de los órganos consultivos.
Una vez que se registre la entrada del proyecto de Ley en el Congreso, será la nueva portavoz de Educación del Grupo Vasco, Isabel Sánchez Robles, la encargada de defender las "lineas rojas" marcadas por el PNV y el Gobierno vasco ante un reforma educativa que ha merecido el rechazo y las críticas de todos los sectores implicados. Las principales objeciones del Grupo Vasco son que la Ley planteada por Wert "supone un ataque al euskera y al resto de lenguas cooficiales" y es "una agresión al ámbito competencial de las comunidades autónomas".
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