"Los 10 `personajes´ del año"

Ángel Sabín nos escribe el siguiente correo y nos envía el enlace a su nuevo artículo: 

"Al fin y al cabo, somos lo que hacemos para cambiar lo que somos" (Eduardo Galeano)

 Esto nos decía Luisa Romero,del IES Leonardo da Vinci, en su felicitación. Eso es educar. Volver el día 8 de enero y seguir,día a día, hora a hora con los alumnos y explicarles, por ejemplo, que no se deben matar animales en peligro de extinción, ni se puede robar, ni se puede ya no decir sino ni pensar que "las compañeras de clase están para ser violadas, como el reglamento del centro", ni... ¿ O qué se va a explicar en esa materia de "Valores éticos"?

Ánimo, compañeros, y animad a los profesores, que hay que seguir e intentar encajar lo que pasa fuera de la escuela, y, claro, sin manipulación, como si los profesores fuéramos los que cambiamos los hechos.

Felices días y a seguir haciendo cosas por cambiar lo que somos como sociedad. Yo os cuento un poco del otro lado, de los hechos.

Un abrazo,

Ángel Sabín

A continuación reproducimos parte de su nuevo artículo, publicado en Ángel Sabín Por Lo Público: 

ASÍ VA EL PAÍS (IV): LOS 10 "PERSONAJES" DEL AÑO

Casi seis millones de conciudadanos se levantan cada día sin trabajo. Otros muchos se organizan como pueden, cada vez con más dificultades, y van al trabajo, a estudiar, al médico, a la compra –cada vez menos con perjuicio para tantos otros-. Miles de yayo-flautas vuelven a madrugar y llenar su agenda para acompañar al colegio, al médico, a la compra, a las actividades. Cuando pensaban estos yayo-flautas ir tirando de su suerte y de su pensión, les salta lo de las “preferentes”, el copago farmacéutico, las subidas de la luz, del IVA, de los impuestos municipales, la congelación de la pensión y ya veremos si se queda ahí. Muchos ganan más con la pensión que sus hijos, preparados en su oficio o bien estudiados, y eso no es la ley de vida. Cada vez son más los mayores, los jubilados que miran con frustración esta cacareada transición; son mayoría los hijos, los jóvenes de hasta 35/40 años que no tienen expectativas de futuro. Es la vida diaria de “este país”, encogida, con crisis, con recortes de todo, con agresiones, con la herencia recibida y con la incrementada; con protestas, encierros, acampadas y con multas; con la roja y con las batas blancas, con las camisetas verdes y vestidos de negro. Entre todos los conciudadanos de este país destacan estos, todos mantenidos por los impuestos de (casi) todos los españoles. Todos de instituciones. Pueden ampliar la lista o darle un recorte, y  también adaptarla al Estado de las Autonomías.

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6. José Ignacio Wert Ortega

Le dieron cinco talentos y los ha invertido bien. Ha tardado un poco, pero al final apostó todos a la FAES y ¡bingo! Pero su ranking se lo ha ganado el solito: el colista, el farolillo “azul”. Y es malo; ya lleva tres borradores de la LOMCE, llenos de erratas y de errores. Hasta los padres de alumnos le han hecho huelga porque no quieren para sus hijos ese modelo de escuela. El campeón de la excelencia.

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10. Javier Fernández Lasquetty

Dicen en su biografía que es admirador de Silvio Berlusconi. Eso solo bastaría para estar en esta lista. Del colegio de El Pilar, del barrio de Salamanca y de ascendencia del condado de Casa Lasquetty.  Siempre ha vivido de la política, desde los 30 años y quedándose sin juventud: Jefe de gabinete de E. Aguirre en el Ministerio de Educación y luego en el Senado y después en el Gabinete de Aznar y diputado en 2004 y luego Secretario General de la FAES y Consejero de Inmigración y de Sanidad con Aguirre. En esos dos polos está su fuerza, majeza y chulería. No sabe cuánto va a ahorrar con la privatización de la sanidad y le pide las cuentas a los médicos y a los sindicatos. Pero, bueno. Los ciudadanos le pagamos a él para que gestione la Sanidad y dice que está mal gestionada. Hay que aplicarle el razonamiento episcopal. Está preparado para no ceder. El pescado ya está todo vendido.

Desde el 5º al 10º todos están con grandes sueldos públicos, para gestionar lo público, pero no creen en lo público y dicen que no funciona. Todos estos tienen su fuente en la FAES, que también subvencionamos generosísimamente con fondos públicos. Si seguimos al obispo de Segovia, el efecto es que privatizan lo público. ¿Puede estar la causa en esa escuela de la FAES? No es por la crisis; es ideología.

P.D. La sanidad pública no se vende, se defiende.