La medida del señor Jose Ignacio Wert, actual ministro de Educación, ha levantado ampollas en varios sectores de la sociedad. Analizamos sus propuestas.
E.T/F.García
Caperucita entró en casa de su abuelita, y la saludó. El tijeretazo, escondido bajo un disfraz, le respondió con voz hermosa. Qué ojos más grandes tienes-exclamó la muchacha. Y ahí se rompió el cuento. Y curiosamente, no fue solo Caperucita, Bella ya no podía pagarse los libros, Cenicienta se quedó en casa, porque la subida del iva le hacía muy caro el vestido, y la manzana de Blancanieves se convirtió en cereza.
El día uno de septiembre se inauguran los nuevos recortes, que prácticamente tocan todos los ámbitos de nuestra sociedad, pero el que más ampollas ha levantado ha sido, sin lugar a dudas, el educacional. Se esperan reducir gastos en Castilla y León, con cambios tales como el aumento de alumnos por clase, el aumento de las horas de trabajo del cuerpo docente, aumentar la matrícula de las universidades en unos 500 euros, o la subida del 21% de IVA en los libros. El Ministro de Educación, José Ignacio Wert, califica estas medidas como dolorosas y apoya la idea de que no queda otra a demás de recortar.
Algunas familias bercianas han declarado su posición al respecto. En general, la medida les resulta excesiva, siendo de opinión común en todos los casos que no se deberían hacer recortes en educación o sanidad, ya que son los pilares del bienestar de nuestra sociedad. Las medidas tomadas por estas familias han sido simples, comprar los libros antes y deshacerse de los gastos superfluos que se podrían heredar de años anteriores, como mochilas o archivadores nuevos. Algunas de las madres encuestadas han contado que con estos nuevos tijeretazos, se ha visto resentida su economía, y que con ellos, han tenido que cambiar en otras facetas para amoldarse al gasto extra. Hay otras sitios de los que recortar-expresaba una de ellas-y mucho más una subida tan fuerte.
Las librerías se expresan
Los sectores más afectados han sido, cómo no, los dueños de pequeñas y medianas librerías, que consideran este reto como un gran riesgo. Algunas de las encuestadas han sido claras: Hemos encargado antes los libros para no tener que subir los precios, pero es un riesgo, ya que podemos no vender todo el stock. La medida les parece excesiva, comprenden los recortes, pero no consideran que cultura sea un lugar apropiado para ellos.
No todo es oscuro
Se pretende ahorrar en el nuevo periodo escolar, lo cual beneficiaría a las arcas públicas. Por otro lado, la medida no es permanente, ya que cuando vuelva la bonanza, también volverán los antiguos precios.
La comunidad de Castilla y León sigue manteniendo ciertas becas, aunque también asumen la situación. La directora provincial de Educación, Mercedes Fernández Gordón también ha transmitido en nombre de la Dirección Provincial ha calificado estas modificaciones como ajustes en nuestra provincia, para mejorar la eficiencia de los recursos que se tienen. Se espera al periodo de matriculación de septiembre para calcular el número de interinos que se mantendrán en su puesto, eso sí, no va a variar la organización del curso anterior.
No solo la educación se ve afectada
Con esta nueva medida no solo se ve dañado el sector de la propia educación, sino también la cultura, que será a partir del día uno más cara. Los hermanos Grimm, J.D. Salinger o Goethe también se verán las caras, ya que los libros de texto, el cine, y otras formas de arte serán también parte de la reforma.
Sí, puede que Caperucita caiga en las fauces del lobo, pero ¿quién sabe? Todo cuento tiene un valeroso héroe que aparece en el momento más inesperado.
Publicado en elbierzodigital.com
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