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sábado, 8 de enero de 2022
Regreso a las aulas el 10 de enero de 2022 (Carta de CONFAPA al Consejero de Educación, Universidades, Ciencia y Portavocía)
Los menores de 12 años solo tendrán que guardar cuarentena si hay cinco o más positivos en su clase
- Las aulas solo se cerrarán si se da un brote con cinco contagios o el 20% de la clase afectada, según el acuerdo entre Sanidad y comunidades, que encamina a los centros a una mayor normalidad mientras avanza la vacunación infantil
- — Acuerdo unánime: la vuelta a clase será presencial
Cambio en el protocolo Covid de los centros educativos a la vuelta de las vacaciones. La Comisión de Salud Pública, que reúne a los directores generales de las comunidades autónomas y al Ministerio de Sanidad, ha acordado suprimir las cuarentenas de contactos en los colegios para evitar cerrar aulas de Infantil y Primaria si hay positivos en medio de la ola más contagiosa de la pandemia y mientras avanza la vacunación infantil.
Hasta ahora, todo el grupo burbuja de niños y niñas menores de 12 años era enviado a casa diez días cuando se confirmaba un positivo como contactos estrechos. Con la modificación, ya no será así: continuarán asistiendo a clase presencial, da igual si están o no vacunados, y solo se planteará la clausura del aula si se da una acumulación de cinco o más positivos "o una afectación del 20% o más de los alumnos en un periodo igual o inferior a siete días".
"En caso de que sean 4 casos o menos o menos del 20 por ciento, se considerarían casos esporádicos y no se recomendaría cuarentena", informa el Ministerio de Sanidad. Los infectados tendrán que aislarse durante al menos siete días, siguiendo la estrategia general.
Para los mayores de 12 años, se seguirá el protocolo general, que exime de cuarentena a los contactos vacunados con pauta completa pero obliga a hacerla a los que no se han inmunizado. Esta diferenciación, sin embargo, no se va a hacer con los niños de Infantil y Primaria.
La ministra de Sanidad, Carolina Darias, evitó confirmar este cambio tras la reunión interterritorial del miércoles que confirmó la vuelta presencial tras las vacaciones, pero adelantó que estaba en estudio. Era la línea de actuación que recomendaba la Ponencia de Alertas, formada por técnicos de Sanidad y de las comunidades, y supone un paso más que en el protocolo de adultos. La Comunidad de Madrid ya se había adelantado al cambio y había informado a sus centros educativos.
Una decisión "adaptada a la situación pandémica actual"
La decisión encamina a los colegios a una mayor normalidad en medio de una ola de contagios predominantemente leves gracias a las vacunas y pretende también dar respuesta a la conciliación de las familias, un asunto que no ha terminado de resolverse pese a que ya han pasado casi dos años desde el inicio de la pandemia.
El Ministerio de Sanidad asegura que los cambios "van dirigidos a garantizar y fomentar lo máximo posible la presencialidad en todos los niveles educativos " y "se adaptan a la situación pandémica actual". El cambio, sostiene Sanidad, "refleja también el importante avance de la vacunación en todos los grupos de edad y tiene en cuenta que los entornos escolares han demostrado a lo largo de la pandemia ser entornos seguros en cuanto a la transmisión del virus". El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha asegurado este viernes, en la misma línea, que hay que "aprender a convivir" con el virus adaptando la respuesta "a las actuales características.
Uno de cada tres niños y niñas menores de 12 años (32,1%) se han puesto ya la primera dosis de la vacuna.
miércoles, 5 de enero de 2022
Sanidad y las comunidades acuerdan la vuelta presencial a clase pero aplazan los cambios en las cuarentenas (Sofía Pérez Mendoza para eldiario.es)
Artículo de Sofía Pérez Mendoza para eldiario.es
- La ministra Carolina Darias aclara que el acortamiento de confinamientos y cuarentenas del protocolo general de diez a siete días si no hay síntomas ya es aplicable a las escuelas hasta que haya una decisión específica
Varios consejeros y consejeras -entre ellos de Andalucía o Madrid- han planteado una relajación de las cuarentenas en las aulas para evitar el cierre de clases si se dan casos positivos, pero el Ministerio ha decidido aplazar el debate.
La Ponencia de Alertas iba a discutir durante el día de hoy un cambio en las cuarentenas de contactos estrechos en los centros escolares para eliminarlas en Infantil y Primaria en todos los casos, estén o no vacunados los menores. Sin embargo, el encuentro del órgano técnico se ha suspendido y queda pospuesto para la próxima semana, confirman fuentes cercanas a la Ponencia.
En todo caso, la ministra de Sanidad ha aclarado que el acortamiento de los confinamientos y las cuarentenas para la población general de diez a siete días, siempre que no haya síntomas, ya se pueden aplicar a los colegios, institutos y universidades. Esto es, si un niño se contagia tendrá que aislarse siete días, como los adultos. Si es contacto estrecho, también deberá guardar cuarentena, puesto que solo está exentos los contactos vacunados con pauta completa y ningún menor de 12 años la tiene todavía.
"Los protocolos generales son aplicables con carácter general", ha señalado Darias, que se ha mostrado no obstante partidaria de que haya una discusión específica sobre las cuarentenas en los centros educativos.
Un 28,8% de niños y niñas menores de 12 años están ya inmunizados con la primera dosis. El porcentaje de vacunados con pauta completa entre 12 y 19 años ya alcanza el 86%.
Mismo protocolo que en junio
El Gobierno ha recordado que la mascarilla sigue siendo obligatoria en todos los espacios, también en el patio; y que es importante perseverar en la ventilación cruzada y en el mantenimiento de los grupos burbuja, como figura en el protocolo aprobado al inicio de curso, que sigue vigente en su integridad, confirma un portavoz de Educación.
El Ministerio de Sanidad, sin embargo, quiere hacer hincapié en que se difundan de nuevo "las medidas clave de protección" y se potencie la vacunación infantil.
Especial atención se va a prestar a las universidades, donde urge "reforzar el cumplimiento de protocolos", tanto en las aulas, los espacios comunes, como en las residencias. Los jóvenes de entre 20 y 29 años tienen la incidencia más alta de contagios, por encima de los niños.
La rueda de prensa ha contado con la presencia por primera vez desde su incorporación del Gobierno del ministro de Universidades, Joan Subirats. A las puertas de los exámenes del primer semestre, el nuevo titular ha confirmado que los exámenes serán presenciales y ha explicado que está "trabajando con las universidades para que tomen las medidas" para que los estudiantes contagiados "no pierdan la convocatoria" si no pueden presentarse.
martes, 4 de enero de 2022
La 'vuelta al cole' será presencial: “Es la única manera de garantizar el derecho a la educación y la igualdad” (Marta Borraz para eldiario.es)
- Las clases en el aula es la apuesta que el Gobierno y la exigencia de familias y docentes que no han parado de alertar sobre los daños que causa la educación virtual en el alumnado
La decisión definitiva de volver a las aulas de forma presencial en todas las etapas educativas en Madrid la ha tomado este lunes el Gobierno autonómico, solo unos días después de que Isabel Díaz-Ayuso asegurara que no descartaba lo contrario. Ya entonces, la ministra de Sanidad, Carolina Darias, adelantó que la presencialidad es "es un éxito y es el modelo del Gobierno" aunque la sexta ola esté en pleno ascenso, mientras el Ministerio de Educación advertía de que no abrir las escuelas tendría "mayores inconvenientes que ventajas". Fuentes de Sanidad confirman este lunes que la presencialidad "es la apuesta" del Ejecutivo de Pedro Sánchez, informa Sofía Pérez.
La sola posibilidad de plantear un regreso a las aulas tras la Navidad que no fuera presencial se ha encontrado con la contundente y unánime oposición de la comunidad educativa, que no entiende cómo este podría ser uno de los pocos ámbitos en los que se podrían imponer este tipo de restricciones férreas ante el avance de los contagios. "Volver de forma presencial y segura es la única manera de garantizar el derecho a la educación y la igualdad de oportunidades del alumnado, y ha quedado demostrado...La semipresencialidad ha causado estragos en el plano académico y emocional", lamenta Carmen Morillas, vicepresidenta de la Confederación Española de Padres y Madres del Alumnado (CEAPA).
La demanda la replicaron en los últimos días otras tantas asociaciones de familias, pero también de docentes y sindicatos. En Madrid, la FAPA Giner de los Ríos se ha mostrado especialmente indignada por el amago de Ayuso: "Se debe garantizar el acceso a un derecho fundamental como es el de la educación (...) Quizá la única manera de dar clase es en los bares, abiertos y sin mascarilla", ironizaba a través de un comunicado de prensa. También para Morillas era una propuesta "incoherente" al mantener al mismo tiempo en la región abiertas las discotecas "o haber visto en fin de año algunas macrofiestas".
Habrá cuestiones, como las cuarentenas de contactos estrechos de positivos o la gestión de los casos, que aún deberán ultimarse en la reunión de este martes, aunque son las comunidades las que tendrán la última palabra. Aunque la incidencia acumulada en la franja de edad de los cinco a los once años se disparó en el último trimestre del año, este grupo de población ya no es el que más contagios reporta en la reciente explosión de la sexta ola: ahora son los veinteañeros y treinteañeros los que lideran la incidencia.
Además, el Gobierno central confía en que la vacunación pediátrica llegue a prácticamente el cien por cien de los menores este mes de enero. Son 3,3 millones de niños y niñas de entre cinco y once años, de los que un 26,8% se ha puesto al menos una dosis. Los últimos datos de Sanidad, del pasado día 23, muestran que en la última semana escolar completa el 98,7% de las aulas han estado en funcionamiento y sin cuarentenas. El número de aulas confinadas en Infantil y Primaria era de 3.000 sobre un total de 417.000, cifra que se reduce a un centenar entre los cursos con alumnado ya vacunado, es decir, de los niveles de ESO, Bachillerato y Formación Profesional.
Una vuelta a las aulas "segura"
En este escenario, también otras organizaciones como Save the Children o el Club de MalasMadres han reclamado el mantenimiento de la presencialidad y se han dirigido por carta a todas las Consejerías de Sanidad y Educación de todas las comunidades para subrayar su importancia. "El impacto de esta medida en la educación o la salud mental de los niños y niñas, así como en las familias en términos de conciliación, hace que ésta deba ser el último recurso", destaca Laura Baena, presidenta de MalasMadres. La escuela tiene, además, "un papel protector de los derechos de la infancia", señala Catalina Perazzo, directora de Incidencia Social y Política de Save the Children, sobre todo de aquellos menores más vulnerables.
Ambas organizaciones llaman a que, en vez de discutir sobre si la 'vuelta al cole' debería ser o no presencial, el debate verse sobre "cómo garantizar la presencialidad en el reinicio de curso, es decir, cómo mantener los centros escolares abiertos para evitar que se amplíe la brecha educativa o que el impacto en la salud mental de la infancia y la adolescencia sea aún mayor".
Por su parte, los sindicatos reclaman volver a poner en marcha las medidas que estuvieron vigentes durante el curso 2020-2021 y que en el fondo son demandas históricas, entre ellas la reducción de ratios o el refuerzo de las plantillas. "Garantizar la presencialidad segura implica una inversión económica y voluntad política decidida. Deberíamos volver a lo que sabemos que ha funcionado", asegura la responsable de Enseñanza de UGT, Maribel Loranca. En CCOO comparten el planteamiento y apuntan a que las recetas para esta sexta ola "no pasan por la semipresencialidad", añade Paco García, secretario general de la Federación de Enseñanza del sindicato, "sino por medidas de apoyo que garanticen la presencialidad segura".
Es algo que la comunidad educativa ya demandó de manera unánime al inicio del curso, cuando los responsables educativos decidieron renunciar a las ratios de un máximo de 20 alumnos mantenidas el curso anterior y una distancia interpersonal de 1,5 metros. El acuerdo fijó entonces que los topes para las comunidades volverían a ser los establecidos en la ley: 25 alumnos por clase en Infantil y Primaria, 30 en Secundaria y 35 en Bachillerato. "Fue una decisión torpe y miope. Sabemos que las comunidades no han gastado todo el dinero del fondo covid del Gobierno central, es un despropósito que al mismo tiempo no se recuperen estas medidas", cree García.
domingo, 2 de enero de 2022
El Gobierno presiona a las comunidades para garantizar la presencialidad en las aulas tras las vacaciones (Ana Requena Aguilar para eldiario.es)
Artículo de Ana Requena Aguilar para eldiario.es
- La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, amenaza con que el regreso de la educación después de Navidad pueda hacerse en modalidad semipresencial
- Hemeroteca — La escuela resiste a la COVID, pero preocupa el ascenso de la incidencia entre los menores
29 de diciembre de 2021
La alarma sonó el miércoles temprano, cuando se conoció que los ministerios de Sanidad, Educación y Universidades se reunirán con las comunidades autónomas la próxima semana para preparar la vuelta a las aulas después de las vacaciones navideñas. Aunque fuentes de Educación aseguraban que el Ministerio no contempla ninguna medida extraordinaria, crecía el runrún de posibles cierres de colegios o del retraso en el inicio de las clases. Fue la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, la que volvió a remover los ánimos cuando aseguró que no descarta una vuelta "semipresencial" a colegios e institutos para los alumnos mayores.Por la tarde, la ministra de Sanidad, Carolina Darias, aseguraba que el modelo educativo de presencialidad en las aulas "es un éxito y es el modelo del Gobierno". El objetivo es, puntualizaba, garantizar esa presencialidad y revisar los protocolos con la "máxima rigurosidad".
El Ministerio de Educación subraya que "no lleva ideas preconcebidas a la reunión" del día 4 de enero y que las medidas adoptadas en verano para este curso están funcionando. "Las aulas son seguras, hay una apuesta total por la presencialidad. No abrir la escuela tiene inconvenientes mayores que sus ventajas, se rompen las burbujas familiares porque tienes que dejar a los críos con otras personas", relatan las mismas fuentes.
Los últimos datos de Sanidad, del pasado día 23, muestran que en la última semana escolar completa el 98,7% de las aulas han estado en funcionamiento y sin cuarentenas. A esa fecha se habían identificado 547 brotes con 2.791 casos en centros educativos, la mayoría en educación primaria. La semana pasada el número de aulas confinadas en Infantil y Primaria era de 3.000 sobre un total de 417.000. Como los protocolos de confinamiento pueden ser distintos en función del lugar y del centro, puede haber otros casos de alumnado enfermo pero cuya clase no haya sido confinada al completo.
Los casos de aulas confinadas se redujeron a un centenar entre los cursos con alumnado ya vacunado, es decir, de los niveles de ESO, Bachillerato y Formación Profesional. "La vacuna es eficaz", traslada Educación. A día de hoy un tercio de la población objetivo de la vacuna pediátrica ya ha sido inoculada. La previsión es que en enero la vacunación llegue a prácticamente el cien por cien. La ministra Darias también destacaba este miércoles el ritmo de vacunación infantil y recordaba que los menores ya no son el grupo de edad con más incidencia.
Buscar el consenso
A pesar de las palabras de la presidenta de la Comunidad de Madrid, el Ministerio asegura que ninguna autonomía ha planteado, por ahora, ninguna medida oficialmente. El consejero de Sanidad y Servicios Sociales de Extremadura, José María Vergeles, pedía el martes que las decisiones sobre las medidas de vuelta a las aulas sean comunes a todas las comunidades. Extremadura apostó a principios de diciembre por una vuelta a las aulas con normalidad tras las vacaciones navideñas.
También Catalunya, que prevé retomar el curso el 10 de enero y donde la secretaria de Salud Pública, Carmen Cabezas, ha confirmado que se empezará "con un protocolo muy similar". El presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, defendió este miércoles retomar el curso escolar con "normalidad" y con "presencialidad", respetando las medidas de seguridad. Andalucía, Castilla-La Mancha, Galicia o Baleares se han pronunciado de manera similar. Las competencias son autonómicas así que, más allá de que exista un consenso en la reunión del día 4, cada comunidad puede adoptar el protocolo que considere.
Lo que parece claro es que la mera posibilidad de que la situación sanitaria influya en el inicio de curso mientras muchas comunidades van, por ejemplo, a permitir las fiestas de fin de año solivianta a familias y sindicatos.
El debate coincidía con la campaña 'Los niños y las niñas no se cuidan solos', de la organización MalasMadres, para mostrar "el abandono total de las familias". "La gente está haciendo la 'trececatorce' para salir adelante estos días. Si tienes la pauta completa y tu hijo es positivo no te dan la baja, pero qué haces con este niño, alguien tiene que cuidarle. Se está dejando el tema a la buena voluntad del pediatra y del médico de cabecera de turno para ver si te da la baja en un momento en que la sanidad está totalmente colapsada. Hay familias confinadas porque no tienen dinero para hacerse una PCR por su cuenta", relata la presidenta de la organización, Laura Baena.
Baena cree que hay motivos para el miedo cuando colegios de distintos lugares del país enviaron a niñas y niños a las vacaciones con sus libros y cuadernos "por si acaso", y cuando muchos protocolos "parecen dirigirse a personas solas que no tienen ninguna responsabilidad de cuidado".
Preocupación por la infancia
Save the Children también se pronunció este miércoles para defender que el cierre de colegios para frenar la propagación de la enfermedad debe ser "la última opción". "Los niños y las niñas nos han dado grandes lecciones de adaptación y resiliencia, pero no debemos olvidar que la pandemia ya ha causado estragos en su salud mental", señala Catalina Perazzo, directora de Incidencia Social y Política de la organización. Save the Children recuerda que existe un consenso internacional, desde la Agencia Europea de Control de Enfermedades hasta la UNESCO, para que el cierre de colegios sea una medida de último recurso.
"A estas alturas ya contamos con suficiente evidencia sobre el impacto negativo que la no asistencia presencial a los colegios ha tenido sobre el aprendizaje y el bienestar de niños, niñas y adolescentes y, de forma más acuciada, en quienes están en contextos con menor nivel socioeconómico", añade Perazzo. Save The Children también defiende la necesidad de contar con más medidas que permitan cuidar y conciliar, como un permiso retribuido para reducir la jornada o permisos retribuidos para personas con niñas y niños a cargo y que estén afectados por COVID.
Los sindicatos muestran también su preocupación por la situación actual. La Federación de Servicios Públicos de UGT, la Federación de Enseñanza de CCOO y CSIF piden recuperar las medidas de refuerzo, como la reducción de alumnado por aula o el aumento de las plantillas docentes para garantizar la seguridad.
martes, 6 de abril de 2021
La escuela, camino de completar el curso sin cerrar por la pandemia a la espera de volver a ser 100% presencial (Daniel Sánchez Caballero para eldiario.es)
- Educación muestra su satisfacción por los datos del segundo trimestre, que acaba con un 99,6% de las aulas abiertas; el profesorado confirma que la bajada de casos permite tener "una continuidad" en clase "muy buena" y aspira a que el curso que viene todo el alumnado vuelva a las aulas a diario
El Ministerio presume de la situación escolar. "Cabe destacar que España es de los pocos países que ha mantenido abiertos los colegios durante estos dos trimestres de curso escolar", señala la cartera que dirige Isabel Celaá en una nota de prensa. La propia ministra recordó hace pocos días en un acto de la Unesco lo importante de que el alumnado acuda cada día (más o menos) a su centro, la organización de la ONU dedicada a la Educación, la Ciencia y la Cultura: "En España creemos que la educación presencial es insustituible", aseguró. En la misma línea se expresa la directora general de la propia Unesco, Audrey Azoulay: "Los cierres prolongados y repetidos de los centros educativos están teniendo un creciente coste psicosocial para los estudiantes, aumentando las pérdidas de aprendizaje y el riesgo de abandono escolar, lo que afecta de forma desproporcionada a los más vulnerables".
Este es el mayor "pero" que se está poniendo en estos momentos desde los sindicatos docentes. La presencialidad de la que hace gala el ministerio es de facto semipresencialidad en la mayoría de las comunidades autónomas, y la realidad sobre el terreno es que el día que toca clase online es un día medio perdido para el alumnado. "El problema de este trimestre no es tanto la situación sanitaria como la presencialidad", sostiene Maribel Loranca, secretaria general de la sección educativa de UGT. "El problema es que no se han cumplido todas las medidas del plan de digitalización", añade en alusión al anuncio del Gobierno de que dotaría de equipamiento informático tanto a centros como al alumnado más vulnerable.
Toni González, presidente de la Asociación de Directores de Instituto del País Valenciano ADIES-PV, coincide en que pese a las bajas que han salpicando el curso la situación se ha conseguido salvar, que no es poco. Y la cosa va mejorando, asegura, aunque también afirma ser consciente de que todo se puede ir al traste tras la Semana Santa, como ocurrió un poco tras la Navidad. "A partir de febrero es cierto que ha ido bastante bien. Los contagios detectados en los centros están en mínimos desde que empezó el curso y eso da una continuidad [a la docencia] muy buena. En mi centro llevamos un mes sin ningún contagio", explica, consciente de que solo es un ejemplo concreto.
¿La próxima parada? Recuperar la presencialidad total, responde González, quien en su condición de tesorero de la Federación de Asociaciones de Directivos de Centros Educativos Públicos Fedadi está en contacto con colegas de todo el territorio. "Nuestra idea es planificar con esta vuelta total a las clases", asegura. "Y si es con COVID, habrá que contratar más profesorado", como ya se ha hecho este año en casi todas las comunidades, añade.
El consenso en torno a la importancia de la presencialidad está bastante asentado. La ministra hablaba en términos puramente educativos, pero algunos expertos también creen que lo es a nivel de seguridad frente a la COVID-19. "Los colegios reflejarán la transmisión de las comunidades, más o menos alta, pero no la amplifican. Son una buena barrera de contención, un mecanismo para aislar positivos de los niños y que estos no contribuyan a diseminar el coronavirus", explica Quique Bassat, pediatra y epidemiólogo. Dicho de otra manera, si los menores no van a clase, donde están más o menos controlados con los protocolos sanitarios, estarán en otro sitio y no necesariamente tan controlados.
Bassat, que viene monitorizando los datos de contagios en las escuelas catalanas –una de las pocas comunidades autónomas que ofrece datos desagregados al respecto– explica que la tendencia es clara: se dan picos de contagios en los periodos postvacacionales (el último fue tras la Navidad) motivados por la transmisión en tiempo de ocio, y luego baja y la situación se estabiliza. La evolución de las aulas cuarentenadas durante este trimestre así lo refleja también.
El inicio de la campaña de vacunación entre el profesorado ayudará a rebajar las cifras, al menos en lo referido a los contagios de adultos. La tasa de contagio entre el profesorado y el alumnado es similar, explica Bassat. Está en torno al 0,15%-0,20%. Es esperable, explica el epidemiólogo, que la transmisión entre su colectivo baje. Aunque, si se quiere llegar a la inmunidad de rebaño que se busca, que se alcanzará cuando el 70% de la población esté vacunada, según las administraciones, habrá que pensar en inocular a los alumnos también, opina Bassat. "Quizá no tanto por ellos mismos, pero sí contribuyen en mayor o menos grado a la transmisión", matiza. Aún no está decidido, pero este experto sostiene que lo más natural es vacunarlos empezando por los más mayores y hacia abajo (como los adultos), porque los adolescentes presentan una mayor transmisibilidad y también porque tienen un estilo de vida más proclive a los contagios.
Tanto el ministerio como las consejerías de educación han apostado por mantener la apertura y han conseguido apagar la retórica del cierre de escuelas, que sonó con fuerza cuando el pico de la tercera ola coincidió con una ola de frío que dejó imágenes de niños con mantas, gorro y guantes en clase ante la necesidad imperiosa de ventilar y ahora parece silenciada.
El panorama europeo
España está, como afirma Educación, entre los pocos países europeos que no han cerrado su sistema educativo del todo en todo el curso académico. La situación ha ido variando según evolucionaban las olas y actualmente solo tres naciones en toda Europa tienen cerrados los centros, y no del todo: son Portugal, que acaba de reabrir sus escuelas infantiles, Polonia e Irlanda, según datos de la Unesco.
A ellas se une ahora Francia, que venía resistiéndose a la medida. El país galo está inmerso en una cuarta ola, registra tasas de incidencia en torno a los 750 contagios por cada 100.000 habitantes en 14 días y el gobierno de Macron ha acabado cediendo a lo que hasta no hace tanto era muy remoto. Los centros cerrarán tres semanas aprovechando las vacaciones. La situación no deja de ser un aviso a navegantes.
España por el momento se mantiene entre los pocos países entre los 27 que están complemente abiertos, sin restricciones (más allá de la semipresencialidad elegida por la mayoría de las Comunidades Autonómas). Bélgica, Luxemburgo, Finlandia, Austria, Croacia y Rumanía son los otros países que mantienen sus centros operando con normalidad. El resto están funcionando a medias.
Nuestro país también es uno de los europeos, comunitarios o no, que menos tiempo han mantenido cerradas las escuelas debido a la pandemia, según datos de la Unesco recopilados por el diario francés Le Parisien. Destacan en esta lista Islandia, que apenas cerró seis semanas, Suiza (6,4 semanas), Francia (9,7 semanas) y Croacia (10). El siguiente es España, que tuvo sus centros cerrados durante 15 semanas (todas del pasado curso). Los grandes países europeos casi duplican estas cifras: Alemania contabiliza 23,6 semanas de cierre, Reino Unido 26 e Italia 29.
A nivel mundial y desde el inicio de la pandemia, las escuelas han estado cerradas por completo durante una media de 3,5 meses (14 semanas), aunque las diferencias regionales son notables. Los que peor están en ese sentido son los países de América Latina y el Caribe, donde acumulan cinco meses (20 semanas) de cierres completos a nivel nacional de media y hay países, como Guatemala, en los que los niños llevan un año entero sin pisar el colegio.
viernes, 8 de enero de 2021
Gobierno y comunidades descartan cerrar los colegios por el incremento de los contagios (Daniel Sánchez Caballero para ELDIARIO.ES)
Publicamos esta información de ELDIARIO.ES
¿Qué hacer con la vuelta al colegio? Acaban las vacaciones navideñas, suben los casos de contagio en España y familias, profesores, sindicatos y expertos debaten en torno a cómo afrontar la (temida, al menos en algunos sectores) vuelta de la actividad educativa. ¿Debe mantenerse el retorno como estaba planeado? ¿Es conveniente retrasarlo? Mientras en algunos países europeos como Reino Unido, Alemania o Dinamarca ya han decretado el cierre de los centros durante un tiempo para tratar de contener la pandemia, en España hay regiones donde ya se ha vuelto y de momento solo Extremadura ha decidido que los alumnos de la ESO en adelante no regresen a la actividad presencial por la alta incidencia de la COVID en la región (la mayor del país, 716 casos por 100.000 habitantes, frente a los 321 de media según datos de este jueves).
Otras comunidades, como Castilla-La Mancha, la han retrasado atendiendo al otro elemento que preocupa a los actores implicados: la ola de frío que recorre España en un escenario en el que la ventilación de las aulas es imprescindible. Docentes de aquellos lugares donde este jueves ya han dado clase han dejado constancia de las condiciones sufridas durante la primera jornada del temporal. "No he pasado más frío dando clase en mi vida", explicaba un docente. La mayoría de las comunidades, de momento al menos, mantienen la fecha prevista o como mucho la aplazaron ya hace unas semanas hasta el próximo lunes. En cualquier caso, algunos gobiernos autonómicos están evaluando la situación y podrían cambiar de parecer según evolucione el fin de semana.
Mario Gutiérrez, del CSIF, explica que hay "mucha inquietud en los centros", protesta porque las decisiones se toman "de forma unilateral por parte de las administraciones" y pide que "se actualicen los protocolos" ante unos datos "preocupantes". Tanto él como Mari Luz González, responsable de acción sindical de STES, lamentan que ninguna comunidad tienen un plan claro para la vuelta que pase por hacer test masivos al alumnado y profesorado –aunque hay regiones como Andalucía que sí los han anunciado–.
En los últimos días, son varias las voces que piden que al menos se retrase la vuelta a los centros educativos para mitigar el posible, dicen, aumento de los contagios tras el periodo vacacional. Las peticiones vienen tanto de personas individuales como de algún médico o dirigente político. En Catalunya hay cierta polémica en los últimos días a raíz de la publicación de una carta, firmada por una veintena de científicos, en la que le piden a la Generalitat que retrase la vuelta alegando que la tasa de positividad casi duplica el valor recomendado (9,51% frente al 5%) y la mayor infectividad de la cepa británica.
El director general de Centres Públics d'Educació, Josep Cambray, ya ha rechazado la petición bajo el argumento de que "los beneficios de las escuelas abiertas superan los riesgos" y porque "los expertos también nos decían de no abrir en septiembre y la experiencia ha sido un éxito". También la Sociedad Catalana de Pediatría (SCP) ha rechazado las afirmaciones respecto a la seguridad y sostiene que "en algunos entornos de la comunidad científica se ha hecho una interpretación errónea" de los datos asociados a la cepa británica: "El grupo de menores de 9 años estaría hiperrepresentado [en el informe que respaldaría esta supuesta infectividad] porque las escuelas estaban abiertas y el resto de la población confinada. Así, esta variante del virus no afecta más a los infantes y mantiene una afectación por franjas de edad similar a la anterior", explica la SCP.
En una línea similar se manifiesta el Centro Europeo de Control de Enfermedades (ECDC, en sus siglas en inglés) en un informe del pasado 23 de diciembre: "Hay un consenso general en que la decisión de cerrar escuelas para controlar la pandemia de COVID-19 debería utilizarse como el último recurso. El impacto físico, sobre la salud mental y la educación de los niños de cerrar las escuelas, además del impacto económico a nivel global, sería mayor que los beneficios" de hacerlo. Un mes antes, la Comisión Europea había aconsejado retrasar la vuelta al menos una semana pasadas las vacaciones.
Hasta el Gobierno ha entrado en la cuestión. María José Sierra, subdirectora del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias (CCAES), ha explicado este jueves que el centro no recomienda actualmente cerrar colegios. "Durante todos estos meses abiertos ha sido uno de los ámbitos en los que mejor comportamiento ha habido y más control", ha ahondado en esta línea de argumentación. "No ha habido brotes importantes, ha habido casos sueltos enseguida controlados y confinados. Habría muchas más medidas que tomar a nuestro entender técnico antes que el cierre de colegios", explicó en rueda de prensa.
Un cierre asociado al confinamiento
Enric Álvarez, investigador del grupo BIOCOMSC de la Universidad Politécnica de Catalunya, explica que el cierre educativo solo tiene sentido en un contexto determinado: "La discusión debería ser si con las incidencias actuales se debe hacer un confinamiento total o no", comenta. ¿Cree este experto que debe haberlo? "Si solo hubiera implicaciones epidemiológicas habría que cerrar, pero hay más cuestiones a considerar", expone.
El pediatra y epidemiólogo clínico Quique Bassat también se manifiesta "abiertamente en contra de retrasar la vuelta". Este experto compara la situación actual con la que se vivió en agosto, cuando se decía que la apertura de los centros educativos iba a ser un desastre (que los datos desmintieron) y explica que "los colegios reflejarán la transmisión de las comunidades, que es alta, pero no la amplifican. Son una buena barrera de contención, un mecanismo para aislar positivos de los niños y que estos no contribuyan a diseminar el coronavirus". Pero también tiene una petición para esta vuelta: "Si se mantienen las escuelas abiertas uno de los factores adicionales que deberíamos incluir en los planes es que los profesores sean personal prioritario para la vacunación", propone. Los docentes forman un grupo propio dentro de los 15 establecidos por el Gobierno en su plan de vacunación, pero no está entre los prioritarios.
Dicen los opositores a la vuelta que el informe del ECDC no contempla las nuevas variantes de la COVID, en alusión a la ínclita cepa británica, a la que se le presupone una mayor capacidad de contagio. El propio estudio del centro europeo advierte de este extremo, en efecto. Pero los expertos advierten de que no hay evidencia científica que respalde esa presunta capacidad infectiva. Y que lo sí está demostrado es que los niños transmiten menos la infección.
"Los niños pequeños se infectan menos, aunque sí hay mucha discusión sobre si transmiten igual o menos", ilustra Álvarez, de la UPC. "Pero como se infectan menos hay indicios de que transmiten menos también. Con las mascarillas, las distancias y la ventilación, en un entorno de movilidad regulado (esto no es como la universidad) tienen menos tendencia a generar cadenas", argumenta.
Bassat añade a estos argumentos de tipo sanitario otros de tipo actitudinal. "Mirando el histórico de los niños, los datos confirman muy bien la evolución, qué pasa cuando están en el colegio, bien controlados, y cómo se desmadra la situación cuando no están bajo este paraguas de vigilancia. Entre septiembre y mediados de diciembre es cuando más baja ha sido la transmisión en el grupo de edad de los niños. Y ha sido empezar las vacaciones y ha vuelto a aumentar la transmisión entre ellos", sostiene. La Sociedad Catalana de Pediatría apunta en la misma dirección en su comunicado de ayer: "La incidencia relativa en los menores ha sido menor respecto a la población general en meses plenamente escolares", escriben. "En verano, hay indicios de que la incidencia relativa en los niños subió; menos vigilancia o más interacción con adultos más contagiosos pueden ser posibles razones".
Álvarez sí explica que tampoco es lo mismo hablar de Primaria que de Secundaria. Tanto a nivel de transmisión entre personas como de sus hábitos sociales y la movilidad que tienen como grupo, factores ambos que influyen en su capacidad de transmitir el virus. "Sabemos que es diferente. A partir de los 12 años, quizá hasta los 14, va aumentando la capacidad de contagio hasta los 16, quizá 18 años. Hay una diferencia clara entre la Primaria y la Secundaria, sobre todo la postobligatoria", explica. "Además, la estructura de movilidad es diferente entre ambas etapas. No está tan bien documentada como la de la Universidad en cuanto a contactos, interacciones, etc. pero sí sabemos que es diferente, el ECDC también lo explica así". Aún así, mantiene, la recomendación del centro europeo sigue siendo mantener abierto porque los beneficios superan a los inconvenientes. La misma línea de actuación que recomienda Álvarez en base a la información disponible. "A menos que haya un confinamiento completo", recuerda.
El frío gélido en las aulas
Y parece, al menos por el momento, que esa va a ser la vía. Mientras, profesionales y familias se preocupan también por la otra realidad, quizá más inmediata: el frío gélido en las aulas los próximos días. María Luz González, responsable de acción sindical de STEs, lo expone con crudeza: "De Madrid para arriba, con un frío gélido, si la COVID no acaba con los alumnos lo hará el frío. Van a estar dando clase con temperaturas bajo cero, cuando no se debería trabajar por debajo de 17º", advierte. En Aragón, al menos en algunos de sus centros, esto ya ha ocurrido este jueves 7, donde se ha impartido clase con las ventanas abiertas mientras fuera nevaba. "La calefacción encendida desde las cuatro de la mañana y con frío en las aulas, no puede ser de otra manera con las ventanas abiertas", explica una profesora.
En este contexto, al menos parte de Aragón y la Comunidad Valenciana han vuelto a las aulas. Este viernes tienen previsto hacerlo en Baleares, Asturias y Galicia. El próximo lunes, si se mantienen las previsiones, será el turno de Madrid, Cantabria, Catalunya, Canarias, Castilla y León o Navarra. Otras como el País Vasco, Andalucía o Murcia tendrán una vuelta escalonada por provincias, municipios o incluso centros.
jueves, 10 de diciembre de 2020
La escuela logra controlar los contagios pero necesita más medios para afrontar el invierno (Marina Estévez Torreblanca para ELDIARIO.ES)
Publicamos esta información de ELDIARIO.ES
El primer trimestre con clases presenciales en medio de la pandemia de coronavirus se da por aprobado por parte de centros, médicos, padres, sindicatos y responsables políticos en cuanto al relativo control que se ha conseguido de los contagios de coronavirus de alumnos y profesores. Todos han respirado aliviados al comprobar que la vuelta a las aulas no ha supuesto la explosión de la epidemia de COVID-19 que muchos pronosticaban y temían, pese a que los pediatras explicaban que no creían que los niños fueran a ser "supertransmisores" con la vuelta al cole.
"En los días previos a la reapertura de las aulas había pánico escénico, se temía una catástrofe y que habría que volver a cerrar los colegios porque todos los niños estarían afectados", recuerda Quique Bassat, coordinador del Grupo de Trabajo de la Asociación Española de Pediatría (AEP) para la Reapertura de la Escolarización y epidemiólogo de ISGlobal. A su juicio, de momento la experiencia deja datos "muy positivos y esperanzadores".
Esto no significa que los espacios educativos hayan quedado exentos de la epidemia, y ha habido aulas confinadas desde principio de curso debido a casos de COVID. El 1 de diciembre este era el caso de 3.289 grupos, un 0,77% del total, según datos proporcionados a este periódico por el Ministerio de Educación. Cuando todas las comunidades autónomas habían comenzado a dar clases presenciales en todos los niveles –aunque con carácter general en Secundaria en régimen de semipresencialidad–, el 29 de septiembre, las clases confinadas eran un 0,9% del total.
A medida que la incidencia acumulada de contagios fue subiendo en el país, ocurrió lo mismo con los casos que se detectaban en los centros, y se alcanzó un pico del 1,7% de las 426.896 aulas/grupos que hay registrados en el país. Este máximo, que supuso el confinamiento de casi 7.000 clases al mismo tiempo, se produjo en la primera semana de noviembre. Esa semana (6 de noviembre) la incidencia acumulada de COVID en España (casos por 100.000 habitantes en catorce días) era de 525,74. En estos momentos, con datos del 3 de diciembre, ha caído a menos de la mitad: 240,89 casos. Actualmente hay 12 colegios cerrados por completo temporalmente por las autoridades autonómicas debido a un escenario de transmisión descontrolada.
Estos datos le son proporcionados al departamento que dirige Isabel Celáa por las comunidades autónomas. La responsable del sector de enseñanza FeSP-UGT, Maribel Loranca, lamenta la falta de homogeneidad de la información sobre la afectación real de la COVID en las aulas, sin que por ejemplo se sepa a qué nivel educativo pertenecen. "En los sindicatos nos enteramos por la prensa, y no de todos los casos, así no podemos hacer un seguimiento real", incide.
En los centros educativos también se producen brotes (cualquier agrupación de tres o más casos confirmados o probables con infección activa en los que se ha establecido un vínculo epidemiológico) y por ejemplo la última semana se notificaron 223 brotes con 1.293 casos. En general son de pequeña magnitud (una media de 5,8 casos por brote) y suponen alrededor del 1,6% de los casos notificados en este periodo, según los datos de Sanidad.
Pero lo normal es que los casos no vayan más allá una vez detectados. Casi siempre se trata de alumnos o profesores que se infectan en otros ámbitos, y que no suelen contagiar en el centro educativo gracias a las medidas de prevención y al hecho de que al menos los niños más pequeños presentan una menor tasa de infectividad, contrariamente a lo que ocurre con otros coronavirus. Por ejemplo, en Catalunya el 87% de los casos en centros educativos no han generado otros secundarios. Esta es una de las pocas CCAA que hace pruebas PCR a todos los alumnos cuando se detecta un positivo en clase.
"Desde el principio de la epidemia en China, se vio que este virus no se comportaba como los coronavirus ya conocidos. Los niños son susceptibles, pero se infectan menos, su enfermedad es más leve y la mortalidad en ellos es muy baja", recalca un documento del Colegio de Médicos de Madrid. Las estimaciones de que el caso primario en brotes familiares sea un niño están entre un 5% y un 10%.
Mucho trabajo para profesores y directores y falta de medios
La menor afectación de los niños por este virus, que se va incrementando a medida que cumplen años, no explica por sí sola que los casos no se hayan disparado en las aulas. Tras seis meses cerrados, desde que se desató la pandemia en marzo, los centros se han preparado con multitud de protocolos de prevención y actuación frente a casos de COVID. Se publicó una guía por parte del Ministerio de Sanidad, y las comunidades autónomas son las que han elaborado las normas. Se incluye la obligación de que los mayores de seis años porten mascarillas, controles de temperatura y reasignación de espacios, de manera que los llamados "grupos burbuja" de convivencia estable no se mezclen entre sí. Cuando se detecta un caso de COVID dentro de ellos, todo el grupo debe guardar una cuarentena preventiva de diez días.
Para el Ministerio de Educación, "las administraciones educativas y, sobre todo, los equipos directivos de los centros y el profesorado en general, han hecho un gran trabajo antes y durante el curso para mantener la escuela abierta, que era el objetivo general. Hay que destacar también el comportamiento responsable de los alumnos y alumnas, incluso los más pequeños. A esto se suma la importante inversión que hizo el Gobierno con el fondo COVID".
La organización de este atípico curso, con normas cuya aprobación se retrasó hasta casi el comienzo de las clases en algunas comunidades, ha supuesto una carga de trabajo y de esfuerzo extraordinario en los docentes y directores de los centros.
"Ha sido muy caótico y ha faltado precisión y planificación. Llevamos una época buena pero hemos llegado a tener hasta cinco aulas confinadas a la vez", relata a este periódico el director de un centro madrileño que prefiere permanecer en el anonimato. "El inicio de curso fue un caos y faltó homogeneidad", coincide el responsable de Educación de CSIF, Mario Gutiérrez.
El presidente del Consejo de Directores de Madrid y del colegio público Santo Domingo de Algete, Óscar Martín Centeno, recalca que la clave del éxito de la adaptación ha sido el propio comportamiento ejemplar de los alumnos, tanto de los más pequeños como de los adolescentes, aunque reconoce que en este último grupo ha habido un progresivo relajamiento de las medidas de precaución.
En cuanto a los medios de los que se ha dotado a los centros, pide que se mantengan los profesores de refuerzo que se contrataron para este curso debido a las medidas especiales, y que la Comunidad de Madrid pretende ya despedir al final de este trimestre (es la única comunidad autónoma que lo va a hacer). Se quiere prescindir de estos profesores pese a que la pandemia continúa.
Además, cuando se confina un aula los alumnos deben tomar clases por internet, al igual que en determinados cursos superiores, algo que en el caso de las familias con menos recursos se convierte en una misión casi imposible. Las comunidades autónomas están poniendo a disposición de los centros tablets y portátiles, pero en algunos casos es ahora cuando están llegando, y en otros no lo harán hasta enero, aunque hubieran sido necesarios desde principio de curso. Además, por ejemplo en el caso de la Comunidad de Madrid no se tiene en cuenta que también es necesario garantizar la conexión del alumno, para lo que no vale con una tarjeta prepago.
"Es una buena noticia que los centros educativos se mantengan abiertos, el cierre tuvo un impacto social y emocional muy fuerte. Pero no se ha garantizado la presencialidad en todos los niveles y etapas educativas", incide la representante de UGT. La enseñanza presencial "más o menos viene funcionando hasta la Secundaria, pero a partir de ahí ha dependido de comunidades autónomas y de centros", subraya, mientras que la semipresenciliadad tampoco está funcionando de manera adecuada en todos los centros.
La llegada del frío
La propagación del virus en centros educativos hasta ahora ha sido menos importante que lo que se llegó a temer. Pero una de las claves para evitar contagios es la ventilación de los espacios cerrados, y la llegada del verdadero frío del invierno, que comienza el 21 de diciembre, supone un reto adicional.
"Ahora que viene el frío hay que extremar las precauciones, los protocolos deben revisarse y pensar cómo se organizan los centros de cara al invierno", remarca Francisco García, responsable de Educación de CCOO.
Este sindicato está elaborando una guía con recomendaciones de seguridad y salud frente a la COVID en centros educativos. De cara al invierno recomienda "sacrificar el confort térmico para salvar vidas" y siempre que las circunstancias lo permitan, realizar actividades académicas en el exterior. Para interiores, se aconseja el uso de medidores de CO2 para conocer el estado del aire, y en los casos en que sea necesario, apoyar la ventilación con elementos técnicos como purificadores.
Además, exigen que se suministren medios adicionales de protección como mascarillas EPI (FPP, las de máxima eficacia) a los trabajadores que trabajen en educación infantil, enseñanzas artísticas o talleres de Formación Profesional. Estos y otros medios de prevención, recalcan, "deben ser suministrados por la empresa a los trabajadores y en su caso también al alumnado".
martes, 3 de noviembre de 2020
Filantrocapitalismo, digitalización y COVID-19 en educación (Geo Saura para El Diario de la Educación)
Artículo de Geo Saura para El Diario de la Educación
- Apuntes para la ministra de Educación y Formación Profesional del Gobierno de España a raíz de la Alianza Público-Privada HAZ.
Las medidas de confinamiento y aislamiento social a raíz de la pandemia COVID-19 están obligando a digitalizar la educación de modo disruptivo y global. Las grandes corporaciones tecnológicas de Silicon Valley y las fundaciones filantrópicas de empresas multimillonarias están leyendo la pandemia global como la gran oportunidad para transformar los sistemas educativos a través de la digitalización y poder expandir sus intereses de mercado. Estas corporaciones y fundaciones son los principales actores políticos beneficiarios de la transformación digital de la educación en la emergencia sanitaria del SARS-CoV-2 por dos aspectos. Por un lado, porque poseen las herramientas, el hardware, el software, las plataformas, las redes de datos y todos los medios necesarios para producir y desarrollar procesos de enseña-aprendizaje no presenciales. Por otro lado, porque poseen grandes cantidades de capital que pueden invertir con mayor celeridad que los gobiernos y desarrollar agendas políticas más ambiciosas, más amplias y menos burocratizadas.
Bajo estas lógicas de cambio global debido a la pandemia COVID-19, el 29 de octubre de 2020 nace la Alianza por la Educación “HAZ”. La alianza HAZ es una red política de corporaciones tecnológicas y fundaciones filantrópicas para transformar la educación del Estado español. Una red política conformada por Fundación La Caixa, Fundación Endesa, Google, Instituto Superior para el Desarrollo de Internet (ISDI) y Fundación Vodafone España. HAZ se presenta en el Teatro Real de Madrid, presidida por la responsable del Ministerio de Educación, Isabel Celaá, como una Alianza Público-Privada de fundaciones y empresas para transformar el sistema educativo español. Es una alianza que prosigue ese fin de transformación bajo tres ejes de actuación: la transformación digital de la educación, el fortalecimiento del rol del docente y el fomento de la educación para el cambio constante en un entorno global. Defienden que se trata de “un desafío que se torna urgente tras la crisis de la COVID-19” y las corporaciones y fundaciones de HAZ son las que están preparadas por contar con una larga trayectoria en la política educativa por haber “capacitado a 101.086 docentes, impactando en 8.932 centros educativos y llegando a cerca de 2,7 millones de estudiantes, presencial y digitalmente”.
Remedios Orrantia –presidenta de HAZ y de la Fundación Vodafone– presenta la alianza como una iniciativa “público-privada” compuesta por “actores de una sociedad civil involucrados y activos” que actúan de forma “complementaria a la administración” para “proponer soluciones para los retos que afronta la educación en España”. Además, la presidenta de HAZ, afirma que la iniciativa está “alejada de ideologías” y está basada en “un espíritu abierto y totalmente colaborativo centrado en la educación en abstracto al margen de cuestiones políticas”.
Isabel Celaá, presentando la alianza y en la misma línea que la presidenta de HAZ, manifiesta que:
“Las alianzas y los partenariados en el ámbito social, educativo y filantrópico, suelen, en general, estar más desarrolladas en otros países que en España. Por eso, el nacimiento, hoy aquí, de HAZ, Alianza por la Educación, es una excelente noticia para la sociedad española y un buen ejemplo de sociedad civil y empresarial comprometida con la proyección y el fortalecimiento de nuestro sistema educativo. Porque la unión entre diferentes para trabajar en una misión común es una clara señal de madurez democrática (…). Defendemos una escuela moderna, más abierta a la comunidad, colaboradora con partners externos capaces de formar alianza y redes de intercambio”.
Pues bien, esas declaraciones de la ministra de Educación y de la presidenta de HAZ son justamente lo que desmonto a continuación. Es decir, el propósito aquí es demostrar brevemente que esos argumentos de que en esta red política “no hay ideologías”, que es una iniciativa de “despolitización de la educación” y que se presencian, con ello, nuevos “avances democráticos”, responden justamente a lo contrario. O mejor aún –por llamar a las cosas por su nombre–, lo que hago a continuación es demostrar que la alianza HAZ es un nuevo avance de “privatización”, “neoliberalización”, “filantrocapitalismo” y “capitalismo digital” en la política educativa española.
Bajo esos fines, lo que sigue está dividido en dos apartados. En primer lugar describo las corporaciones y fundaciones que conforman HAZ y algunas de las lógicas de actuación de sus proyectos educativos. En segundo lugar exploro la red política HAZ como la gran alianza para producir nuevos espacios de privatización y neoliberalización, y poder expandir las lógicas filantrocapitalistas y del capitalismo digital en la política educativa española.
La Fundación La Caixa es el apartado de la donación filantrópica y de responsabilidad social corporativa que CaixaBank ofrece a la alianza HAZ. CaixaBank, que tiene una larga tradición en la filantropía española, en educación actúa desde la Fundación EduCaixa. Las inversiones filantrópicas de CaixaBank hacen que la entidad bancaria se esté consolidando como uno de los principales actores políticos privados encargados de transformar la digitalización educativa en la política educativa española. Principalmente, se está expandiendo en esta lógica a través de la incorporación del programa de “Big Data: la inteligencia de los datos”. Este programa en educación tiene como fin liderar las políticas de Big Data en la política española y el desarrollo de la competencia digital docente. Con esta iniciativa, CaixaBank, se convierte en el principal actor político que está transformando la educación a través de análisis predictivos y nuevos procesos de control datificados en los procesos de enseñanza-aprendizaje.
La Fundación Endesa es la iniciativa de actuación filantrópica de esta corporación energética y eléctrica del IBEX35. Las inversiones filantrópicas de Endesa están destinadas esencialmente a intervenir en las políticas sociales a través de fomentar el espíritu empresarial mediante programas de emprendimiento y a través de la transformación educativa con proyectos de digitalización. La Fundación Endesa actúa, además, en educación superior a través de la Cátedra Endesa de la Universidad Pública de Sevilla y mediante enseñanzas de máster y doctorado, becas y premios a estudiantes destacados. Recientemente ha creado el Programa de doctorado interuniversitario “Sistemas de energía eléctrica” entre cuatro universidades públicas: Universidad de Sevilla, Universidad del País Vasco, Universidad Politécnica de Cataluña y Universidad de Málaga. No obstante, en la alianza HAZ, la filantropía y los intereses de mercado de Endesa se orientan hacia la digitalización de la educación obligatoria. Llevan desarrollando programas educativos previos como el “RetoTech”; donde se centra en la incorporación de Eventos y Premios para digitalizar la educación. Concretamente, RetoTech son programas de innovación educativa basados en el desarrollo de iniciativas tecnológicas a través de la robótica, la programación y la creación de apps. Este reto educativo de Endesa está ahora centrado en expandir la domótica en los hogares. La domotización que incorporan en su reto tecnológico se basa en introducir en el sistema educativo programas de inteligencia artificial, kits de robótica, aplicaciones de redes neuronales artificiales, sistemas de aprendizaje automático (machine learning), lógicas de aprendizaje profundo (deep learning) y programas de Big Data.
Google –la gran corporación tecnológica de Silicon Valley– es el actor político más importante a nivel mundial en la transformación digital de la educación a raíz de los efectos de la emergencia sanitaria derivados de la COVID-19. Ha donado, desde el inicio de la pandemia, más de 100 millones de dólares a la política educativa global para digitalizar la educación mundial. La inversión que establece en la alianza HAZ es una acción más, que lleva desarrollando desde marzo 2020, cuando comenzó a liderar la “Alianza Mundial para la Educación” de la UNESCO con el fin de proporcionar herramientas y discursos formativos en sustitución de la presencialidad de las aulas. Se consolida como la empresa más importante en política educativa global a través de la normalización y expansión de sus softwares y programas de formación docente focalizados en la digitalización educativa. Destaca la expansión global, y en todos los niveles educativos, que se está haciendo del uso normalizado de Google GSuite for Education y de su programa Google Meet. Esta filantropía de Google en las aulas comenzó en el inicio de la pandemia a través de la iniciativa “Teach from Home” y posteriormente con “Teach from anywhere”. Estas iniciativas de Google se basan en plataformas y recursos educativos donde ofrecen información, consejos, capacitación y herramientas para poder desarrollar procesos educativos no presenciales. Los objetivos de Google son muy ambiciosos para liderar la agenda educativa global durante la pandemia y lo serán en tiempos post-pandémicos.
ISDI es una corporación y escuela de negocios digital dedicada a la formación en educación superior. La formación la centran en la disrupción digital de la educación, programas de emprendimiento y desarrollo de networking. La meta, como sostienen desde ISDI, es contribuir a acelerar la digitalización de la sociedad y acelerar el cambio hacia un nuevo modelo económico más competitivo y eficiente, que maximice el potencial de personas, empresas y mercados. Esta lógica de cambio de paradigma la desarrollan a través de másteres y seminarios. Los másteres de 450 horas (9 meses) ofrecidos tienen un costo entre los 18.500 euros (el más barato) y 36.850 euros (el más caro). Por su parte, los seminarios de 40 horas (una semana) tienen un costo de 7.950 euros. Aunque la enseñanza en ISDI es principalmente digital, la empresa tiene campus educativos en cinco sedes importantes: Madrid, Barcelona, Ciudad de México, París y Silicon Valley. La formación de ISDI está a cargo de relevantes corporaciones tecnológicas, consultoras y entidades bancarias, que proporcionan altas cuotas y oportunidades de negocio en redes de capital social (o networking, como lo llaman en la entidad de la alianza HAZ), tales como: Google, Facebook, Microsoft, Airbnb, BBVA, McKinsey & Company, Grupo Prisa, Telefónica, Vodafone, Twitter o KPMG.
La Fundación Vodafone España es la parte filantrópica del operador de telefonía móvil que lidera la presidencia de la alianza HAZ. La Fundación Vodafone, que actúa bajo el protectorado del Ministerio de Educación, es un actor político privado de gran importancia en la política educativa española. Destaca en educación el programa de digitalización de las aulas denominado “DigiCraft”. Este programa se basa en expandir la competencia digital del alumnado a través de propuestas didácticas que tienen como ejes centrales la gamificación y la experimentación en las aulas. Además de ostentar la presidencia de HAZ, la Fundación Vodafone es la verdadera propulsora de la alianza. En enero de 2020, previamente a la expansión de la pandemia, presentó lo que denominaron como “Alianza por la Educación”, junto a las corporaciones de Telefónica, Endesa, Google, BBVA y CaixaBank. Como se sostuvo en enero de 2020, por parte la presidenta de la Alianza HAZ, la iniciativa fue propulsada por Isabel Celaá bajo su plan estratégico de modernización del sistema educativo español “sin entrar en ideologías”.
Que el Gobierno ofrezca la capacidad de transformar la educación de un país a cinco empresas privadas con amplios intereses de mercado no es, ministra, una “señal de madurez democrática”. Y por supuesto, como usted bien sabe, ministra, tampoco es una despolitización de la educación. Lo que produce la unificación del Gobierno, las corporaciones tecnológicas y las fundaciones filantrópicas en HAZ es consolidar la primera gran Alianza Público-Privada de una red política educativa en el estado español. Y todo ello, es una privatización ideológica de la educación en España. Es algo que lleva dos décadas estudiándose bien en la política educativa española y, ahora, en literatura académica, lo denominamos “privatización exógena”, “privatización externa” o “exo-privatización” de la educación.
Además, ministra, esta iniciativa de privatización no es una señal de “madurez democrática” arropada bajo la falacia discursiva de “despolitizar la educación” y “alejarse de las ideologías”. La educación es y será política; está y estará defendida por formas de pensamiento productivas y discursivas que pretenden constituir nuevos órdenes (o ideologías). Ministra, convencido, al igual que otros colegas, de la necesidad de politizar las problemáticas educativas, a continuación le planteo, en forma de interrogante, una señal de madurez democrática, politizada e ideológica distinta a la privatización de la red política educativa HAZ:
¿Y si la toma de decisiones para trasformar el sistema educativo español recayera en debates públicos, de una comunidad educativa activa y democrática con principios ideológicos heterogéneos, que tuvieran como eje central la defensa de la educación pública?
Pero hay más, ministra. Estas formas ideológicas de privatización se denominan en la literatura académica bajo el término “neoliberalización”. Esto quiere decir que la teoría ideológica, política y económica del neoliberalismo, así como sus prácticas, se basan en la actualidad en una resituación constante que se readapta a los contextos y a los tiempos. Los procesos de neoliberalización se desarrollan a través de dos variables.
En primer lugar, la alianza HAZ produce una neoliberalización estructural. Esto significa que lo que hace esta red política es una expansión de prácticas político-económicas fundadas en la libertad empresarial, la libertad de mercado y la libertad de comercio. Se desarrolla a través de un proyecto de clase extensible del capitalismo a nivel global para generar políticas y modos de actuación social en una acumulación constante de orden capitalista.
En segundo lugar, la alianza HAZ produce una neoliberalización basada en la gubernamentalidad como racionalidad de gobierno. Esto significa que es el Estado quien crea y potencia las lógicas de mercado a través de la competencia. Se desarrolla bajo la racionalidad y la capacidad que tiene el Gobierno para involucrar a actores políticos privados y avalar sus lógicas de “conducción de las conductas” que son materializadas a través de prácticas de subjetivación, emprendimiento, individualidad y competitividad.
Ministra, ¿sin ideologías? Apuntes sobre filantrocapitalismo y capitalismo digital
La alianza HAZ es el último gran avance de gobernanza filantrocapitalista en la política educativa española. El filantrocapitalismo es la hibridación de las lógicas de producción del sistema capitalista con las nuevas formas de actuación de las fundaciones filantrópicas de corporaciones multimillonarias. Estas acciones filantrocapitalistas se basan en expandir los principios del capitalismo a través de grandes donaciones que se materializan en agendas políticas y discursos para erradicar las desigualdades sociales. Lo que hacen las fundaciones filantrocapitalistas, es crear las políticas con la pretensión de paliar las desigualdades sociales mediante enormes donaciones, al mismo tiempo que pueden recibir beneficios económicos y sociales de las inversiones realizadas. Las fundaciones filantrocapitalistas, como la que conforman la alianza HAZ, están encontrando, con la pandemia global COVID-19, nuevas y ventajosas “ventanas de oportunidades” para entrar en la arena política y poder ampliar los escenarios de mercado. El filantrocapitalismo actúa en alianzas de redes políticas heterogéneas (actores públicos y privados) mediante donaciones multimillonarias que se realizan de modo acelerado y experimental para transformar las políticas públicas. Y todos estos cambios, como bien sabe la comunidad educativa, ministra, son ideológicos, producen una politización muy activa de la educación y no son para nada democráticos.
Además, esta red política de gobernanza filantrocapitalista es la primera expansión del capitalismo digital en la educación que viene producida por el Gobierno de España. El capitalismo digital es un sistema económico y social en el que los medios de producción se basan en tecnologías digitales y son de propiedad privada y, además, las lógicas de mercado son las que asignan los recursos, y el capital es la fuente que actúa como generador de riqueza. O dicho de otro modo, se expanden las tecnologías digitales bajo nuevos procesos de producción y acumulación capitalista a través de la economización digital de todas las esferas sociales. El capitalismo digital de la alianza HAZ se fundamenta en el solucionismo tecnológico de Silicon Valley y las lógicas del capitalismo de vigilancia. Las donaciones que realizan las corporaciones de la alianza HAZ para paliar los efectos de la pandemia del SARS-CoV-2, hacen que los filantrocapitalistas tomen especial protagonismo en la configuración y puesta en marcha de las políticas educativas públicas, a la vez que transforman la educación expandiendo el capitalismo digital. Y por todo lo anterior, ministra, estas corporaciones tienen muchos intereses ideológicos, políticos y de mercado para expandir el capitalismo digital en educación.
En definitiva, ministra, en esta gobernanza filantrocapitalista para paliar los efectos de la pandemia COVID-19 y transformar la educación en España, “sí hay ideologías”, y no es una “señal de madurez democrática”. Lo que hace la alianza HAZ, es consolidar en el sistema educativo del Estado español los últimos avances de la privatización y la neoliberalización a través del filantrocapitalismo y el capitalismo digital. O lo que es lo mismo, se consolida en la política educativa española el “filantrocapitalismo digital en educación”.
Continuará…
Geo Saura es profesor de Política Educativa en la Universidad de Granada.
geosaura@ugr.es
Profesor Ayudante Doctor en la Universidad de Granada (2018-2023). Ha sido Investigador Postdoctoral en la Universitat Autònoma de Barcelona (2015-2018). Fue Investigador Predoctoral (2012-2015) entre Universidad de Granada y University of Roehampton desarrollando su PhD internacional sobre políticas y neoliberalismo, que recibió el Premio Extraordinario a la mejor Tesis Doctoral en Ciencias Sociales. Es en la actualidad Investigador Principal de Proyecto Precompetitivo para jóvenes investigadores sobre Redes Políticas de Gobernanza Filantrópica.
jueves, 29 de octubre de 2020
Politizar el malestar docente (Julio Rogero y Jesús Rogero para El Diario de la Educación)
Artículo de Julio Rogero y Jesús Rogero para eldiariodelaeducacion.com
- Es urgente y necesario politizar el malestar del profesorado y concienciarnos de que no estamos al servicio del poder, sino del pueblo. Esto no equivale a tomar una posición partidista, sino a reconocer el origen de ese malestar y comprometernos ética y activamente con el derecho de todas las personas a una educación digna.
Una de las repercusiones que ha tenido la pandemia es el padecimiento de un nuevo malestar entre los docentes de todos los niveles. A los malestares que teníamos por las políticas destructivas de lo público durante décadas, se han añadido los derivados del confinamiento y el improvisado comienzo de curso. Este nuevo desasosiego tiene como ingredientes, entre otros, el miedo, el estrés y la incertidumbre cotidiana provocados por la inseguridad sanitaria.
Emocionalmente, muchos docentes estamos afectados: hemos tenido que dejar parte del alumnado que teníamos, actuar como individualidades aisladas y excesivamente inestables, soportar la presión de las familias que exigen una lógica y necesaria seguridad para sus hijos e hijas y, al mismo tiempo, garantizar una calidad de la enseñanza que dé respuesta a las necesidades de todos, cuando las necesidades, en muchos casos, se han multiplicado. Ello mientras la Administración y algunos medios de comunicación cargan sobre los centros educativos la responsabilidad de lo que pueda suceder. El resultado es un malestar individual que mezcla el sentimiento de abandono por parte de la Administración y la sensación de una menor valoración social.
Este proceso se une a otro de más largo recorrido por el que la educación se ha ido despolitizando de forma progresiva. Ello explica, en buena medida, la respuesta del colectivo docente a su malestar actual. Más allá de tomas de posición minoritarias de gran valor, hay una respuesta silenciosa y mayoritaria en forma de sumisión y obediencia. Esta reacción se enmarca frecuentemente en la cultura de la queja, en la que los demás tienen la culpa y nosotros no podemos hacer nada más que lamentarnos y tragar. Caemos así en la tentación de la inocencia, en la que eludimos nuestra responsabilidad, y nos instalamos en la desesperanza y la inacción.
Hemos compartido docencia con compañeros con quienes no se podía hacer ninguna referencia crítica a situaciones problemáticas porque, decían, era hacer política y había que ser neutrales. No eran conscientes de que la apelación a la neutralidad es defender el statu quo, y esta es también una opción política a favor del desorden establecido. Por eso, el profesorado, en general, sigue asumiendo pasivamente su malestar; porque denunciar públicamente lo que lo provoca es hacer política, algo que se ha convertido en un tabú vergonzante en lugar de en un imperativo ético y profesional.
Para educar y educarnos necesitamos justo lo contrario: generar una cultura de positividad y compromiso en la que se analicen las causas de los problemas, para así afrontarlos y transformar la realidad injusta que se nos impone. Es urgente y necesario politizar el malestar del profesorado y concienciarnos de que no estamos al servicio del poder, sino del pueblo. Esto no equivale a tomar una posición partidista, sino a reconocer el origen de ese malestar y comprometernos ética y activamente con el derecho de todas las personas a una educación digna. Olvidar que la educación es política es ignorar que su función es construir ciudadanos capaces de convivir en una sociedad democrática, plural, diversa y superadora de las injusticias sociales y económicas.
No podemos permanecer ajenos a lo que sucede en la sociedad en general y en el sistema educativo en particular como si no tuviera que ver con nosotros. La despolitización nos lleva a apuntalar la manipulación, la alienación y la pedagogía del opresor, y a aceptar políticas que son un atentado contra el derecho a la educación de nuestro alumnado y de nosotros mismos. Es necesario aceptar que somos parte del problema y de la solución, salir de la falsa neutralidad, de la cultura de la queja y de la obediencia, superar la tentación de la inocencia y comprometernos en favor de la escuela pública que queremos.
Mientras la situación educativa no vaya en la dirección deseada será necesario cierto malestar. Una desazón que nos mantenga despiertos y actuando. Toca transformar el malestar destructivo que nos invade en una esperanza audaz y cargada de rebeldía que nos lleve a construir una educación de calidad para todo el alumnado sin excepción. Sin duda, este objetivo merece nuestro compromiso.
Julio Rogero pertenece a los MRP y es miembro del Foro de Sevilla.
Jesús Rogero es profesor de Sociología de la educación en la Universidad Autónoma de Madrid y miembro del grupo promotor de ILA por una escolarización inclusiva.
miércoles, 28 de octubre de 2020
Carta de los colegios públicos del distrito Latina sobre el abandono de la educación pública ante el nuevo coronavirus
17 AMPAS de los colegios públicos del distrito de Latina escriben una carta abierta a Ayuso y Almeida sobre el abandono de la educación pública ante el nuevo coronavirus
Las asociaciones de madres, padres y familias de 17 colegios públicos del Distrito de Latina (Madrid) hemos escrito una carta abierta a los responsables políticos de la Comunidad y el Ayuntamiento de Madrid manifestando nuestra preocupación por la situación que vive la educación pública ante la segunda ola del nuevo coronavirus. Como familias de niñas y niños escolarizados en colegios públicos, hemos identificado las carencias de los colegios de nuestras hijas e hijos, y pedimos a los/as responsables públicos del Ayuntamiento y la Comunidad de Madrid lo siguiente:
- Que la consejería de educación informe de forma veraz y directa a las familias de las medidas específicas tomadas para la salvaguarda de la seguridad de nuestros hijos e hijas en los colegios públicos de la región.
- Una redistribución eficaz de espacios allí donde sea necesario, con instalación de aulas prefrabricadas si hace falta. La instalación de filtros, u otras medidas similares, que garantice la higiene de las aulas y permita cerrar las ventanas ante la llegada del frío.
- El refuerzo de las plantillas de profesoras y auxiliares en aquellos colegios que lo demanden.
- La reactivación y refuerzo de las acciones de mantenimiento y mejora de los centros, para mejorar su seguridad, habitabilidad y comodidad.
- El refuerzo del personal de los comedores escolares de forma urgente para permitir el mantenimiento de los grupos burbuja y la habilitación de otros espacios si es necesario, y la reducción de ratios de número de alumnos por monitor/a, así como el refuerzo personal de limpieza y conserjes.
- La incorporación de enfermeras escolares a todos los centros públicos, para realizar una vigilancia adecuada de la salud de los niños y un plan eficaz de salud comunitaria.
- La puesta en marcha un plan específico para asegurar la correcta atención a los colectivos de niños y niñas más vulnerables, incluyendo las necesidades educativas especiales, los niños y niñas con enfermedades crónicas y los niños y niñas confinados/as con más dificultades sociales y/o familiares.
- La colaboración de la policía municipal en las entradas y salidas de los colegios que eviten las aglomeraciones de personas.
- La aceleración de la puesta en marcha de las herramientas telemáticas que permitan la docencia online y aquellas relacionadas con la gestión de los centros y la comunicación con las familias, y el compromiso de que se garantizará una docencia online adecuada para niños y niñas confinados/as.
- Ayudas sociales para las familias afectadas por confinamientos y aquellas que permitan la conciliación familiar.
- El refuerzo del sistema sanitario de forma que los resultados de las PCR estén disponibles en un máximo de 48 horas, para evitar riesgos sanitarios innecesarios en los colegios de la región.
El texto íntegro, en el que detallamos nuestro análisis y reflexión, puede consularse en las RRSS de todas las asociaciones firmantes.
Firmado: Las AMPAS de los Colegios de Educación Infantil y Primaria:
CEIP Amadeo Vives, CEIP
Antonio Machado, CEIP Bartolomé Cossío, CEIP Bolivia, CEIP Ciudad de Badajoz,
CEIP Costa Rica, CEIP Ermita del Santo, CEIP Francisco Arranz, CEIP Gonzalo
Fernández De Córdoba, CEIP Hernán Cortés, CEIP Jovellanos, CEIP La Latina, CEIP
Parque Aluche, CEIP Perú (Carabanchel), CEIP República del Uruguay, CEIP
Alcalde de Móstoles, CEIP Nuestra Señora de Lucero.
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