Iniciamos el curso escolar con la desagradable sensación de una película ya vista. Ya sabemos que eneste inicio, como en el pasado, el permanente estado de propaganda electoral lleva a los políticos que nos gobiernan tanto en el Estado como en la Comunidad de Madrid a hacer grandes declaraciones de intenciones.
Si en septiembre pasado el Secretario de Estado de Educación, Don Marcial Marín, decía que ya para ese curso el número de alumnos por clase descendería a 25 alumnos en infantil y primaria, 30 en secundaria y 35 en bachillerato, es decir, el que marca la ley, y si los medios loaban el acuerdo del PP con Ciudadanos para la investidura de Cifuentes donde se contratarían más profesores, se reducirían las tasas universitarias o se crearía una red de formación del profesorado, pues ahora tenemos más noticias.
Nada menos que las 93 medidas estrella de Cifuentes de acuerdo educativo: trilingüísmo, programación, robótica, encuestas de satisfacción a las familias, decreto de inclusión de los alumnos con necesidades educativas especiales…Volvemos a la propaganda y a las maniobras de distracción:
¿taparán con la robótica las aulas abarrotadas de niños o con el trilingüísmo la ausencia de evaluación del bilingüismo? Digno del Club de la Comedia.
Pero desgraciadamente la realidad es mucho más triste. No solo no bajaron el número de alumnos por aula el año pasado sino que este curso han seguido aumentándolo llegando a los 28 alumnos por aula en infantil, 29 en primaria, 33 en secundaria y 39 en bachillerato. Y no son casos aislados, muy al contrario ésta es la situación habitual en bastantes aulas de todos los colegios de Aranjuez, públicos y concertados. Y lo peor está por venir: las aulas pueden llenarse aún más, pues sólo desde junio se ha escolarizado a casi 300 alumnos.
No olvidemos que en los últimos dos años se han cerrado aulas exclusivamente en centros públicos de Aranjuez, que si siguieran abiertas habrían permitido unapequeña reducción del número de alumnos por aula, dejando margen para escolarizaciones extraordinarias. Pero no, las cerraron, despreciaron a los más de 12.320 ciudadanos que firmaron contra esas medida y ahora los niños de Aranjuez sufren las consecuencias. Nos han mentido y nos vuelven a mentir: las ratios de alumnos por aula que soportan los colegios de Aranjuez y de toda la Comunidad de Madrid no tienen soporte legal. La ley de racionalización del gasto público de 2012 está derogada y, en consecuencia, el referente es la LOMCE, que es la que Secretario de Estado prometió cumplir y sigue ignorando. Decisiones como estas deberían tener consecuencias legales para sus responsables.
Su desprecio a los ciudadanos no conoce límites: cerraron tres aulas en infantil y dos más de secundaria, ignorando hasta tres propuestas del pleno municipal de Aranjuez, despacharon sin ningún argumento y con un montón de mentiras a los padres miembros de la Federación de AMPAS y a los representantes de nuestra Plataforma y los Sindicatos, ignoraron intervenciones como la de la portavoz de Educación de Podemos con referencias concretas a la situación de Aranjuez en la Asamblea de Madrid, incumplieron la proposición no de ley del 21 de abril aprobada por unanimidad en la Asamblea para reducir las ratios,
ningunearon los informes de CCOO sobre la masificación de las aulas madrileñas y sus graves consecuencias, y se rieron de las peticiones de los equipos directivos y las AMPAS.
Nada de esto les hizo torcer el gesto, pues el Consejero de Educación, Rafael Van Grieken, defendió en la Asamblea de Madrid que su Consejería estaba haciendo una muy buena planificación.
Tan buena que solo hace una semana ha habido que abrir de urgencia un aula de 1º de Primaria, otra de 2º, otra de 1º de ESO y desdoblar un grupo de bachillerato. Tan buena que las aulas están al límite de su capacidad física. Tan buena que entre el cierre y la reapertura se siguen perdiendo profesores por el camino, profesores que los niños necesitan. Tan buena que los equipos directivos deben rectificar los horarios de los centros cada vez que se crea un grupo. Tan buena que se han vuelto a reducir los profesores de alumnos con necesidades educativas especiales. Tan buena que se sigue sin cubrir las
bajas del profesorado de forma inmediata. Tan buena que no se permite la repetición de los alumnos que lo necesitan para no tener que crear nuevos grupos. Tan buena que hay centros que aún no tienen sus plantillas al completo. Tan buena que los alumnos de 2º de bachillerato no saben todavía cómo serán las pruebas de acceso a la universidad una vez desaparecida la Selectividad. Esto es la verdad, pregunten en los colegios, pregunten en los institutos.
¿Seguirán los equipos directivos denunciando esta situación? Sí. ¿Se seguirá amenazando a aquellos equipos que lo hagan? Muy posiblemente. A la vista están todos los equipos que han sido valorados negativamente y cesados después de muchos años de experiencia y buen trabajo.
Por eso, y aunque algunos pretendan hacernos ver que el PP de Cristina Cifuentes y del consejero de Educación Rafael Van Grieken es muy distinto del de Esperanza Aguirre los hechos lo desmienten, la soberbia y la prepotencia siguen aquí. Pero ahora tienen cómplices que los apoyan y sostienen: Ciudadanos debe exigir el cumplimiento escrupuloso de la Ley.
Es nuestro deber exigir que cumplan, como mínimo, aquello a lo que se comprometieron: que doten a los centros educativos de todos los medios personales y materiales que precisan para cumplir su función, que aumenten la partida de becas para atender a todos los alumnos que lo necesiten sea cual sea su etapa educativa, que tomen las medidas necesarias para garantizar YA el número de alumnos por aula que establecen las leyes vigentes, que se cubran las bajas de profesores desde el primer día sea cual sea la
edad de los alumnos.
Resulta surrealista que estas personas sean las máximas responsables de garantizar la educación de nuestros hijos, nuestras libertades y el cumplimiento de la Ley. Pero en la Plataforma por la Escuela Pública de Aranjuez seguiremos luchando por la Educación Pública. Palabra.
Aranjuez, 19 de septiembre de 2016
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