- Tres profesores cuentan los motivos de la protesta.
- La huelga indefinida solo está respaldada por el sindicato CGT, por lo que solo ha alcanzado un máximo de repercusión del 4%.
- "El año pasado hicimos 13 huelgas, pero los recortes han ido a más", denuncian.
Montse Muñoz, Juan Vivas y Elena Martín (nombre ficticio) tienen varias cosas en común. Los tres son profesores de Secundaria, pertenecen al sindicato CGT y, lo más importante, están en huelga indefinida desde el inicio de curso escolar en la Comunidad de Madrid
Al contrario, aseguran estar entre los más frustrados y, por lo tanto, entre la minoría (un 4%, según CGT, y entre un 0% y un 1%, según la Consejería de Educación) que está secundando la convocatoria y está dispuesta a perder todo el sueldo que sea necesario con tal de que se acaben los recortes.
No se declaran vagos, como se les ha llegado a llamar desde la Administración pública, sino muy concienciados con la educación pública y con el futuro de sus alumnos. También niegan ser los "radicales" entre los docentes.
"Tengo 270 alumnos. No llego"
Montse está destinada en el Centro Integrado de Enseñanzas Musicales y ESO Federico Moreno Torroba de Carabanchel (Madrid). Tiene 37 alumnos a los que ni ha visto. Y no por gusto.
"Hago esto porque es lo que hace dormir tranquila. El año pasado hicimos 13 huelgas diseminadas —11 convocadas por los sindicatos mayoritarios, una por la CGT y la huelga general, apoyada por todas las centrales— y no conseguimos nada. Esto no es una fábrica en la que un día de protesta para la cadena de producción. O lo alumnos están en casa o no hay resultados", explica.
Elena, profesora de Filosofía en un instituto de la zona sur de la región, coincide en que las movilizaciones parciales ya no valen. "No nos han escuchado. El ministro Wert [responsable de Educación] todavía decía hoy que de qué recortes le están hablando. ¡Pero si yo no doy abasto! Han quitado profesores, han subido el ratio en las clases y, en total, tengo 270 alumnos. Físicamente no llego. Atenderé a los que pueda", relata.
Para Elena, además, este es el décimo año en el que no tiene plaza fija. Se la sacó en 2002 y, desde entonces, ha pasado por media docena de centros. "Así es imposible", se lamenta.
El coste: 84 euros al día
Como sus compañeras Juan, tutor de Plástica en el José Luis Sampedro de Tres Cantos y con 230 alumnos, pierde alrededor de 84 euros cada día que no se presenta en su puesto de trabajo. Sin embargo, insiste en que no es dinero lo que pierden, sino "el sistema de educación pública, que los gobernantes están desmantelando de acuerdo a una ideología que dice que, quien tenga dinero, tendrá calidad". "Los demás, sabrán leer y escribir y punto", remacha.
"El año pasado las medidas (fundamentalmente, el recorte de al menos 1.000 profesores interinos y, con ello de las clases de apoyo, desdobles, aulas de integración y actividades escolares o extraescolares) nos pillaron tan de sorpresa que provocaron un enfado brutal. Ahora, esa fuerza se ha perdido. Los sindicatos mayoritarios la han dilapidado", insiste.
Llamada a los padres
Las críticas a UGT, CC OO, APN y CSIF se repiten entre los profesores en huelga indefinida. La#verdeindefinida, como se conoce en las redes sociales, no cuenta con su apoyo. Razonan que es una medida extrema y, de hecho, ya se negaron a utilizarla el año pasado, pese a que las asambleas de profesores dieron su visto bueno. Sin su fuerza de movilización, el paro total es minoritario.
"Entendemos que los compañeros tengan miedo. El año pasado ya nos quitaron recursos, pero es que este curso les hemos dejado quitarnos la paga extra de Navidad sin hacer nada, y eso es más de lo que perdimos en las 13 huelgas de 2011. Llevan años incrementando el dinero a la concertada y es el momento en el que van a acabar con la pública", advierte Juan.
Montse tampoco está contenta con sus compañeros: "Les falta conciencia social. Nadie quiere perder dinero en su nómina, pero la huelga indefinida es lo único que nos queda". Para Elena, la palanca que provocaría un cambio son los padres de los alumnos: "Esto es un conflicto social. Muchos profesores están embobados esperando porque aún puede llegar lo peor, pero si lo padres estuvieran en la calle masivamente, ni el Gobierno ni la Comunidad se atreverían a hacer esto, pero también están asfixiados por el recorte de becas y las subidas de impuestos".
La #verdeindefinida se concentró este jueves en la Puerta del Sol para tratar de ganar en visibilidad. Por la tarde, se unieron a la #mareabinaria formada por los informáticos que reclaman el reconocimiento de sus categorías profesionales. Este viernes, los profesores están llamados a una asamblea para decidir si continúan *. "Pase lo que pase, esperamos haber servido de ejemplo", se despiden.
Publicado en 20minutos.es
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